Seguro que tienen que hacer memoria para recordar la última vez que levantaron los brazos al cielo y se abrazaron a su compañero/a de fatigas en La Rosaleda. La explicación detrás de estos actos impulsivos y llenos de felicidad lo esconden la alegría de marcar un gol. Una ritual que hace mucho tiempo que no se lleva a cabo en Martiricos, concretamente tres meses. El Málaga CF tiene sedienta a su afición de puntos y de goles. Y es que no marca un tanto como local desde el pasado 19 de noviembre, coincidiendo con el gol de Borja Bastón sobre el Deportivo de La Coruña que dio el triunfo sobre los gallegos. Un partido que queda ya muy lejos en el calendario y que ya se ha llevado por delante también muchas penas.

En el minuto 84 de dicho partido, Borja Bastón caminaba hacia Rubén Martínez tras pase de Juanpi. El delantero madrileño resolvía el mano a mano con una picada de maestría sobre el portero y desataba la locura en Martiricos. Era la culminación de una remontada que valía tres puntos y que daba vida y esperanza al malaguismo. Desde entonces, el Málaga no ha vuelto a ganar en casa y, por su puesto, tampoco ha vuelto a marcar.

Desde entonces, sequía. No ha vuelto a marcar el Málaga CF en Liga. Cinco partidos con la portería rival a cero. Un registro negativo histórico, el de estar cinco partidos consecutivos sin ver puerta. Con pocas ocasiones y con la sensación de desazón en la grada. El malaguismo casi no recuerda cómo celebrar un gol. 456 minutos sin ver puerta. Una condena.

En lo que va de campeonato, el Málaga se ha quedado sin marcar como local en siete de los 11 partidos que ha disputado. Y sólo suma nueve tantos en La Rosaleda de los 14 que tiene en total.

Una racha negativa

Pero el problema con el gol no es sólo en casa. El conjunto blanquiazul está ahora envuelto en otra crisis goleadora que le condena a ser el colista de la categoría. Y es que no ve puerta desde el pasado 22 de enero, en Ipurúa, con el tanto de En-Nesyri en la primera mitad. Desde entonces, tres partidos estrellados contra la nada. Un total de 344 minutos sin marcar que se une a la lacra goleadora que ya tiene en casa.

El Chory y Rolan, con tres dianas cada uno, siguen siendo los máximos goleadores del equipo y eso que ambos no ven puerta desde hace también mucho tiempo, desde el 2017.

El Málaga, contra el Valencia este sábado en La Rosaleda (20.45 horas), se ha propuesto acabar con su sequía goleadora de una vez por todas. Sólo así estará más cerca de conseguir los tres puntos, de poder salir del pozo y de recuperar cierto optimismo entre sus aficionados.