Antonio Tapia (Baena, Córdoba, 13 de noviembre de 1959) afronta su enésima etapa en el Málaga CF, aunque esta vez lo hace desde los despachos, como director de La Academia y con un importante reto por delante: que la cantera siga siendo uno de los motores de este club pese al descenso de categoría y a la reducción presupuestaria. El técnico dejó su plaza de docente el pasado mes de noviembre para volver al fútbol, para regresar al Málaga CF. Un cambio drástico que analiza detenidamente para La Opinión de Málaga.

¿Qué se ha encontrado en La Academia a su llegada?

Bastante cercanía con los técnicos. Alguno ya lo conocía, otros, no. Me han facilitado mucho el trabajo. Entiendo que la acogida ha sido muy gratificante para mí.

¿Cómo se fraguó su regreso al Málaga CF?

Mario contactó conmigo en la etapa anterior, pero entendía que esa etapa ya la había cubierto. Ahora, en esta nueva etapa de Mario, me volvió a llamar y vi que podría ser un buen momento para volver a contactar con el mundo del fútbol y que podría aportar mi experiencia al Málaga CF. Me decidí a afrontar el reto por insistencia de Mario.

¿Cuál es el modelo de cantera que proyecta para el Málaga CF?

Un modelo malagueño. Soy continuista de directores de cantera como por ejemplo Pepe Andrade, Antonio Benítez, Fernando Rosas, Pepe Sánchez, Manolo Martín o Manolo Navarrete. Estos técnicos ya demostraron que con el producto autóctono, jugadores básicamente de Málaga, fueron capaces de conseguir y promocionar a futbolistas de aquí en el primer equipo, incluso en bloque. En etapas anteriores, con el producto autóctono nuestro de Málaga, se han conseguido éxitos en la cantera, porque hemos sido campeones de España de Juveniles también con chavales casi todos de Málaga, con Manolo Fernández de técnico. El filial ascendió de Segunda B a Segunda A. Casi todos eran de Málaga. Entiendo que ese modelo es válido. Pero desde mi punto no existe un modelo único, al menos no rígido. El modelo de cantera se tiene que adaptar a las circunstancias y a los medios que uno tiene, a la situación económica, al modelo de juego del primer equipo, a las características de los técnicos. Hay que ir adaptándose a esta serie de circunstancias. Y la propuesta es un modelo de contingencia, adaptándose a las circunstancias. Pero siempre teniendo prioridad los aspectos humanos, la formación personal del jugador, la formación académica -que para mí es muy importante-, y también la futbolística. Las tres van unidas, se potencian y se complementan. Hemos visto jugadores académicamente buenos y ordenados mentalmente que luego en el terreno de juego y en el día a día son futbolistas con un mayor potencial de cara a ser promocionados al primer equipo.

Entonces, su filosofía de cantera parece ´romper´ con la que puso en práctica Manel Casanova y que continuaron Arnau y Miguel Calzado€

Yo lo que intento es aprovechar todo lo bueno que hicieron mis antecesores, incluido en las últimas etapas, que se han hecho cosas muy bien, tanto a nivel clasificatorio como a nivel organizativo. Intento enriquecerme en lo que hizo Manel, que en paz descanse y que es un referente no sólo en Málaga sino a nivel nacional e internacional. Todo lo bueno que yo creo que me puede valer lo cojo y lo aprovecho. Hemos cambiado, en relación a la etapa anterior, los porcentajes de los jugadores autóctonos con los de fuera. La experiencia nos ha dicho que aquí hay mucho talento y lo que hay que hacer es darle la oportunidad. Entonces, en igualdad de condiciones, nosotros en este momento los porcentajes son muy desiguales. Queremos que un 50% de fuera y otro tanto de casa, o un 60% de casa podría ser razonable. Queremos dedicar más en lo que es en captación, lo que es en Málaga. En número de ojeadores y en atención, queremos dar prioridad en esto. Lógicamente no vamos a ser provincianos. Y si no lo complementamos con jugadores de fuera, difícilmente vamos a competir con los grandes. No sería coherente ni lógico. Pero sí está claro que siempre Málaga y su provincia ha dado muy buenos jugadores. Miramos para casa y lo que no tengamos aquí, lo miraremos fuera. Esta es mi idea sin querer compararme con nadie. Entendemos que para que los equipos sean competitivos tiene que haber mucho talento y que en ciertos puestos que no los tenemos aquí hay que ir fuera. Lo mismo sucede con los entrenadores. La escuela malagueña de entrenadores siempre ha sido muy buena, y los preparadores físicos, también. El preparador físico de la selección española es de Málaga. También estamos realizando una campaña de captación y estamos sondeando a entrenadores que están haciendo muy buen trabajo, tanto aquí en la provincia como fuera. Pero no vamos a descartar a otros técnicos que traeremos también si nos pueden enriquecer con la intención de poder seguir creciendo.

Hay muchos exjugadores del Málaga CF que están ya trabajando en la cantera, caso de Dely Valdés, Nacho, Fernando, Goitia o Duda, que está como su mano derecha. ¿Es una intención del club abrir las puertas a estos exjugadores que forman parte de la historia del club?

Creo que es una obligación nuestra, porque hay jugadores emblemáticos que pasan por el primer equipo que tienen unas vivencias que pueden transmitir a los más pequeños. Ellos lo han sentido y así es más fácil transmitir. Es una obligación, lo que no quita que haya otros perfiles que necesitamos para complementar y para hacer un cuerpo técnico global potente. También contamos con profesores que son entrenadores, entrenadores de otro perfil que puedan venir de fuera. La proporción hay que buscarla dándole prioridad a los entrenadores de la casa.

Siempre se ha bromeado con que el Málaga CF tiene la Ciudad Deportiva más grande del mundo porque sus equipos están repartidos por todo Málaga. ¿Cómo se gestiona eso?

No es lo más cómodo para nosotros, pero es una realidad que llevamos ya muchos años. Desde el 1978, que estuve en el filial de jugador, ya reclamamos una Ciudad Deportiva en condiciones. Y se va a hacer realidad. En breve tendremos una primera fase de la Ciudad Deportiva, que nos va a dar un salto de calidad evidentemente. Pero lo más importante es el factor humano en cualquier organización. Porque también se ha demostrado. El filial, los juveniles y la cantera del Málaga ha demostrado que sin recursos, que en peores condiciones que otros clubes grandes, hemos cubierto los objetivos de promocionar jugadores al primer equipo y hacer muy buenas clasificaciones en todas las categorías.

¿Cambiará mucho la cantera del Málaga, dará un salto de calidad con La Academia en Arraijanal?

Hombre, contar con un gimnasio, los campos, una sala de vídeo€ Eso nos va a dar un salto de calidad. Trabajar todos juntos, porque uno de los aspectos claves es el seguimiento de entrenamiento. Tenemos que evaluar el día a día e intentar mejorar aquellos aspectos y hacer un seguimiento. Tener un contacto directo con los cuerpos técnicos, estar muy cercanos y buscar un feedback con ellos para el plan que queremos a los chicos.

Una de sus primeras decisiones ha sido la de cambiar el entrenador del Atlético Malagueño cuando iba líder destacado, prescindir de Manel Ruano y optar por Dely Valdés. ¿por qué?

Dentro de La Academia, a parte del objetivo clasificatorio, hay otros objetivos. Y entiendo que no hay nada personal en esa decisión. Es sencillamente que Manel tiene sus puntos de vista y no los voy a cambiar. Y yo tengo los míos y no me los va a cambiar. Entonces, al final lo más honesto para ambas partes es, en este caso, sustituirlo por un técnico que se ajuste más a mi filosofía. Sin querer decir que yo esté en lo cierto. Manel es un buen entrenador y un profesional. Pero hay filosofías diferentes, todas respetables, y si yo soy el director de la cantera las marcamos desde el club. Debe primar los criterios que entendemos nosotros que debe tener La Academia. No hay nada personal, he tenido muy buena relación. Hay puntos donde no coincidimos y ese ha sido el motivo. No ha habido salidas fuera de tono porque somos personas educadas. Le deseo lo mejor.

¿Si el filial no asciende este año es un fracaso?

Entiendo que sí, que si no asciende es que algo no lo estamos haciendo bien. Llevamos diez años no haciendo bien algo, porque ha habido etapas anteriores donde el presupuesto se duplicaba en el filial y no se ha logrado ascender. Si no ascendemos, algo no está funcionando. No es normal que un club como el nuestro, con el presupuesto que manejamos -ahora la mitad a etapas anteriores- el equipo no consiga el ascenso. No voy a poner excusas en ese sentido. Fracasaríamos en el plano clasificatorio. Hay otros objetivos, pero en ese punto entiendo que el Atlético Malagueño debe estar en Segunda B, como mínimo. Por presupuesto, entidad y calidad y talento que tenemos aquí en la zona. Entiendo que sería una decepción grande si el filial no asciende. Hay otros aspectos que estamos abordando, que se han abordado bien y que esperemos que nosotros también lo abordemos bien, que es la promoción de jugadores al primer equipo. Debemos ajustar el perfil. Hablando con los entrenadores del primer equipo, ellos me comentan que el jugador que está promocionando al primer equipo le cuesta adaptarse. Entonces, nuestra intención es que el jugador vaya con la mayor madurez posible, para que el cambio no sea brusco y no le permita irse a otro club cedido, sino para quedarse en el primer equipo.

¿Influirá mucho en la cantera el descenso del Málaga?

Dentro de mi filosofía o modelo de cantera también tenemos que buscar la austeridad. Optimizar el presupuesto. No podemos hacer grandes equipos en cantera a base de billetes o presupuesto. Mi objetivo es formar jugadores para el primer equipo en nuestros equipos, no firmar a jugadores con unos niveles futbolísticos altísimo.

Se habla mucho de darle la alternativa ahora, en la situación que está el Málaga, a jugadores canteranos. ¿Cree que sería recomendable?

Históricamente, cuando el primer equipo no va bien, se abre una puerta a la cantera. Eso pasa en todos los clubes. La distancia se acorta. No es lo mismo competir en Primera que en Segunda. Entiendo que el primer equipo esté en Segunda va a permitir que algunos jugadores que no contaban en un principio para jugar en el primer equipo puedan tener cabida o una oportunidad.

Para el filial se firmó precisamente este curso a jugadores en ese sentido, ya curtidos en otros clubes e incluso con experiencia profesional. ¿Va a cambiar eso?

Mi intención en un futuro es que la edad no sea un hándicap para dar el salto. Tanto en los equipos inferiores como en los juveniles hasta el primer equipo. He visto a entrenadores de elite darle alternativas a juveniles en el primer equipo. Alexis Ruano es un ejemplo aquí en Málaga. Entiendo que la edad no es un inconveniente. El que tiene talento, interés y madurez, cuanto antes se le dé la oportunidad, mejor. Uno de los grandes activos del Málaga es su cantera. Se han promocionado jugadores en los últimos años. Lo ideal sería que perdurasen también con el tiempo en el primer equipo para tener una base sólida de jugadores de la casa.

¿Hay alguna hornada que esté para subir al primer equipo en corto periodo de tiempo?

Lo tengo clarísimo. El filial está líder en una categoría menor como la Tercera, pero el caso de los juveniles están por encima. Tenemos a los ´mayores´, que van líderes, pero están también los ´pequeños´ y están por encima del Sevilla y están entre los tres primeros ambos equipos. El San Félix -equipo vinculado al Málaga- sólo ha perdido un partido este año, que ha sido contra el Málaga CF. Es inusual. La planificación que hicieron también para este curso fue excelente. En el San Félix se une todo. El talento de su cuerpo técnico y su entrenador y que su trabajo es magnífico. Y el talento y el acierto de captación en la etapa anterior. Creo que han firmado a jugadores de mucho talento.

En el Betis hay dos jugadores malagueños jugando y otro que comenzó jugando en Málaga. ¿Eso tiene que revolverle las tripas al director de la cantera del Málaga?

Pues sí, porque nos gustaría que jugasen aquí con nosotros. Cuando eso sucede, en ocasiones es por error nuestro, que no se han hecho bien las cosas, y en otras porque las circunstancias lo determinan. No puedes controlarlo todo y la familia, los agentes y los propios jugadores tienen sus intereses. Hemos abordado situaciones de intentar traer a jugadores de aquí y a lo mejor prefieren jugar en otros equipos. Somos conscientes de que eso puede suceder, pero vamos a intentar que suceda lo menos posible. No quiero ser poco coherente, pero a veces vienen jugadores de fuera y son más profesionales que uno de casa. Nuestra obligación, desde un club deportivo malagueño, es atender lo más cercano y familiar posible. Pero sin olvidar que el producto de fuera puede enriquecernos, como he dicho anteriormente.

Usted ha entrenado en Segunda División en varias etapas. ¿Qué se va a encontrar el Málaga en esa categoría?

Es cierto que tengo mucha experiencia en esa categoría, e incluso en algún equipo recién descendido como lo fue el Betis. Y es una situación compleja y muy difícil. Y se tiene que mentalizar el club, la plantilla, el cuerpo técnico, la afición y la prensa. Porque como no vayan de la mano, por la experiencia que he tenido, la empresa no va a ser fácil. Ascender es muy difícil. Y el que desciende, como piense que con el nombre y la historia va a ganar€ Lo hemos visto con el Atlético de Madrid, el Rayo Vallecano, el Mallorca, que descendió a Segunda B. O remamos todos en la misma dirección, o la temporada se puede hacer muy larga y desagradable. Pero aquí en Málaga no es la primera vez, tenemos experiencia. Incluso desapareció el Málaga y se volvió a rehacer. Y jugamos Champions. No es nuevo para nosotros esta situación. De hecho la afición, si vemos la respuesta en los últimos partidos, no es una respuesta negativa analizando la situación en la que estamos. Es una afición entregada en su equipo. Siguen animando. Sabemos que la temporada que viene será complicada y lo mismo se mantiene un número de abonados altos. Y la gente se conciencia. Y lo mismo ese paso atrás nos permite coger impulso y afianzarnos en Primera en el futuro con posibilidades de conseguir nuevos logros en el futuro.

Cuando se prescindió de Míchel su nombre sonó como una opción para coger el banquillo. ¿Esa opción fue real o más por el deseo del malaguismo?

A mí Mario me ha llamado para un puesto concreto. Él cree que mi perfil se ajusta. Cuando vine sabía a lo que venía. En ningún caso buscaba un camino corto para acceder al banquillo del Málaga. Yo disfruto en el día a día y a la vez sufro. Cada fin de semana me llevo tres o cuatro alegrías y una o dos decepciones. Por suerte la mayoría son victorias, pero sufro con las derrotas. A nivel emocional es un infierno, es un vaiven continuo. Intento regular porque yo pienso como entrenador. Y veo las cosas que se hacen bien y mal. Y tengo las emociones similares a las del banquillo. Los lunes estoy con un desgaste grande. Y eso no es muy saludable. También es cierto que la relación con los cuerpos técnicos es máxima. Los apoyo mucho cuando pierden. Hay que corregir cosas desde la dirección de partidos hasta los entrenamientos. Le doy mi punto de vista y tenemos una relación muy cercana y enriquecedora. Es un puesto nuevo para mí pero es mucho más complejo que la dirección del primer equipo. Con mucha responsabilidad. No tienes 25 jugadores, tienes 200 con padres, madres, ojeadores y entrenadores. Personal de oficina, el servicio médico, la captación, luego tienes que tratar con los rivales, la prensa, aunque estoy más cómodo en ese aspecto que en el primer equipo. Aunque echo de menos el banquillo, que es verdad que es un mono que uno tiene después de tantos años entrenando, de alguna manera entiendo que el puesto es un reto importante que espero estar a la altura. Llevo cuatro meses y ni en la victoria ni en la derrota me voy a apuntar lo que no me corresponde. Yo sé que los resultados de esta temporada el mérito hay que dárselo al trabajo que se viene realizando en las últimas temporadas.

¿Cuándo se notará su mano en la cantera?

Yo creo que en dos o tres temporadas el sello que queremos dar, entiendo que podría ser un momento para hacer una evaluación sobre lo que he aportado como director de cantera. De momento acabo de aterrizar como quien dice. Es un puesto difícil y complicado. Quizás tenga alguna ventaja por haber trabajado en docencia varios años. También he entrenado en categorías inferiores, en el Málaga o en Las Lagunas, que le tengo un cariño especial. Esos clubes de barrio te forman. Y cuando llegas aquí y ves los medios que disponen pues no puedo quejarme. Y ves el trabajo que hacen los clubes de la provincia. Aquí en el Málaga somos muy dados a darnos los éxitos, pero los equipos de la provincia, ese trabajo, de sus directivos y de sus directivos, nos beneficiamos de ese trabajo.

¿Se van a estrechar vínculos con los equipos malagueños?

Sí. Tenemos un convenio tipo para los equipos. Establecemos unas pautas donde todo el club de la provincia que quiera hacer convenios con nosotros, estamos abiertos. Hay unos criterios y nuestra intención es establecer convenios con todos los que estén dispuestos. Nosotros nos beneficiamos y también podemos aportarles con cesiones. Nuestra intención es llevarnos bien con todos, colaborar en cuanto necesiten y estrechar vínculos.

En el campo formaba un tándem con Duda y ahora lo hacen en los despachos€

Circunstancias de la vida. Él siempre ha sido un jugador muy importante para mí, el modelo dependía de su zurda. Siempre me había llevado muy bien con él. Me ha sorprendido gratamente porque Sergio, a la hora de entrenar no era un jugador fácil, con un talento impresionante, pero los talentos son difíciles de gestionar. Pero tuve muy buena relación y ahora se ve que el fútbol influye y madura a las personas. Encuentro un Duda diferente. Muy familiar en cuanto al trato en le día a día. Muy trabajador. No hay horario ni día de descanso. Muy ilusionado. No es fácil para un jugador profesional cambiar el chip. No ser foco de atención, estar en el punto de mira de los padres y agentes€ Los frutos, lo mismo tú no los ves. Y el trabajo que realizas fructifica a lo mejor dentro de varios años. Estamos aprendiendo mucho los dos, nos estamos adaptando de forma muy rápida. Él me dice que quiere ser entrenador, pero esta experiencia le va a ser muy enriquecedora en todos los sentidos. Si se va a dedicar al fútbol de elite, le va a servir para valorar dónde te encuentras y todos los privilegios que tiene el entrenador de elite.