Al Málaga CF le están yendo las cosas muy bien en Liga y pese a que Juan Ramón López Muñiz ha confeccionado un once tipo más que reconocible, la profundidad de armario y las lesiones han propiciado que ya sean 20 jugadores de campo en tan solo ocho jornadas los que ha empleado el técnico asturiano en LaLiga 123.

Y es que, con el debut de Héctor Hernández el pasado domingo en Riazor frente al Deportivo, ya solo quedan cuatro futbolistas (quitando los porteros) sin debutar en Liga. Se trata de David Lombán, Miguel Torres, Diego González y Saed Haksabanovic, de los que aún no se ha acordado Muñiz en Liga. Diego González si jugó en Copa del Rey ante el Almería. Además, de los tres porteros de la primera plantilla, Andrés Prieto tampoco ha jugado.

Las razones por las cuales Muñiz aún no ha tirado de estos jugadores son diversas. Se tratan de tres defensas y un extremo, quizás las demarcaciones con más competencia dentro de la plantilla. La buena dinámica defensiva que maneja el Málaga hace que Muñiz quiera cambiar lo menos posible atrás, por lo que la zaga parece intocable. Solo la lesión de Cifu ha impedido que los cuatro habituales en labores defensivas jueguen todos los minutos. Luis Hernández, Pau y Ricca lo juegan todo.

Además, se da el caso de que David Lombán aún está inmerso en su pretemporada particular después de haber pasado un verano sin equipo y llegar con el mercado ya vencido. Miguel Torres, por su parte, ha salido de una lesión que le ha tenido en el dique seco todo el verano y en cuanto a Diego, que partía como titular indiscutible en pretemporada, ha visto cómo la dupla Luis-Pau está siendo muy rentable para Muñiz y aún espera su oportunidad en Liga.

En el caso de Haksabanovic, la adaptación al fútbol español, los problemas con las lesiones y las convocatorias con su selección le han impedido que tenga cierta continuidad en los entrenamientos y por lo tanto sigue sin aparecer en las convocatorias.