El delantero argentino del Málaga Gustavo Blanco, que podrá jugar el domingo contra el Sporting al admitir el Comité de Competición las alegaciones del club malagueño a su segunda tarjeta amarilla ante el Osasuna, afirmó ayer miércoles que «lo esperaba» porque no fue «con mala intención en esa jugada».

«Esperaba que me quitasen la tarjeta porque en la jugada no fui con mala intención. Fue una situación muy dudosa para el árbitro, el tomó esa decisión. No me dijo nada, me acerqué yo a decirle algo, pero no me dejó hablar con él y me mandó a vestuarios. Son partidos y hay que afrontarlos con 11, 10 ó 9 jugadores. Tenemos el próximo partido y hay que intentar sumar».

Gustavo Blanco, que lleva seis goles en su primera temporada con el Málaga, cedido por el Shaktar Donetsk ucraniano, se refirió al partido ante el Sporting. «Ya olvidé el partido pasado, ahora hay que pensar en el partido del Sporting y en sacar un buen resultado. Va a ser un encuentro muy difícil con el público en contra. Tendremos que estar bien en todas las líneas, tanto en defensa como en el centro del campo como en la delantera». «Tenemos buenos jugadores, hay buenos cambios.Confiamos entre nosotros y esperamos hacer un buen partido», dijo.