Adrián González Morales (Madrid, 25/05/1988) es de esos futbolistas que se expresa cara a cara al igual que lo hace con un balón en los pies. Sabe transmitir, habla con mesura y con unas tablas impropias de en un futbolista. Quizás su educación futbolística, con un padre como Míchel de espejo, ha influido en ello. Ahora, el centrocampista afronta su segunda temporada en el Málaga tras ser uno de los protagonistas del descenso. En una extensa charla con La Opinión desgrana la actualidad malaguista, carga contra el formato de LaLiga 123 y habla sin tapujos de su padre y su pasado reciente al frente del banquillo malaguista.

Vuelve a la acción mañana, después de un partido de sanción. ¿Con ganas?

Con muchas ganas. No quería haberme perdido el partido ante el Sporting, estaba intentando lo máximo posible aguantar la quinta tarjeta, pero no pudo ser posible. Tengo ganas sobre todo por la sensación que se nos quedó el otro día, teníamos los tres puntos casi en el bolsillo. Ahora volvemos a jugar en casa que siempre es especial.

Muñiz quiso sacarle el lado positivo a las sanciones para que así jugadores importantes como usted o N'Diaye tuvieran descanso, ¿piensa como él o le gusta jugarlo todo?

Yo siempre lo quiero jugar todo, quiero participar. Lo importante para un jugador es siempre estar dentro del campo. Lo que sí creo que es positivo es que entró gente que no estaba participando tanto y respondió. Eso es importante para un equipo en una competición tan larga.

¿Cómo vio a Lacen y Boulahroud ante el Sporting?

Bien. Creo que lo hicieron bien. Había gente que entró que ni siquiera había tenido medio tiempo entero. Respondieron, eso es lo que necesitamos. Cuando en un equipo el que entra responde es muy importante. Esto es muy largo, existen sanciones, lesiones y momentos de forma y necesitamos que todos estemos activados.

Pero la sensación que da el equipo es que N'Diaye y usted son insustituibles, ¿lo comparte?

Para mí no sería positivo tener esa sensación porque creo que eso hace que te acomodes, es mi opinión. Lo importante es tener la sensación de que juegas el fin de semana porque te lo has ganado. Eso te lleva a la siguiente semana a trabajar fuerte para ganarte el puesto.

¿Cómo es jugar al lado de un portento como N'Diaye?

Nos entendemos perfectamente, nos llevamos muy bien dentro y fuera del campo. No necesitamos hablar mucho entre nosotros porque sabemos interpretarnos dentro del campo. Existe una compenetración bastante buena entre los dos. Estoy contento de poder tener a mi lado a un jugador con su experiencia y con envergadura física que impone tanto. No obstante, he jugado con otros compañeros. Cuando he jugado con Mehdi (Lacen) también me he sentido muy bien, nos conocemos de hace tiempo, es un jugador con experiencia y sabe llevar el partido a donde se necesita.

Es su segunda temporada en el Málaga y paradójicamente se le ve más feliz ahora, en Segunda, que en la anterior, en Primera.

Es normal. La temporada pasada no fue agradable para ninguno. Pasaron un montón de cosas y la mayoría fueron negativas. Cuando el rendimiento general del equipo no es bueno es difícil que los jugadores brillen. Esta temporada está saliendo todo de cara. Es lo que dices tú, estoy mucho más feliz, más contento y obviamente eso también se refleja en el terreno de juego.

El curso pasado recibió numerosas críticas y parte de la afición no entendía que siguiera en el equipo tras el descenso, ¿cómo vivió todo ese proceso?

Con tranquilidad. Fue una temporada tan mala que la mayoría de nosotros lo que necesitábamos era desconectar. Yo fui muy claro, me puse a disposición del club para lo que necesitara. La temporada había sido catastrófica y el club tenía que hacer cambios. Si yo entraba en esos planes de cambio tenía que aceptarlo. Pero ya lo he dicho más veces, yo no firmé en el Málaga para jugar una temporada nada más e irme. Cuando el club se puso en contacto conmigo para explicarme sus planes y también el míster lo tenía ya bastante claro.

¿Se esperaba un inicio tan bueno del equipo?

Me esperaba un inicio bueno porque habíamos trabajado bien durante la pretemporada y porque el equipo tenía los conceptos bastante claros, pero no al nivel que estuvimos de ganar cinco partidos seguidos y colocarnos tan arriba tan pronto.

¿Qué le pasa al equipo fuera de casa?

Nos está costando, nos está costando ganar. Es cierto que han habido momentos que el equipo tenía el partido controlado e incluso por delante en el marcador y después se nos ha escapado por detalles. Son cosas que van a ocurrir durante toda la temporada y no creo que solo nos vaya a pasar a nosotros. Habrá rivales que también sufra ganar fuera. Es verdad que tenemos que mejorar los registros fuera de casa pero sin obsesionarnos. Tenemos que seguir con nuestro trabajo, que es el que nos ha llevado a poder estar ahí arriba disputando los puestos de cabeza y hay que ir paso a paso.

Por contra, en casa la cosa cambia. ¿Cree que la mística y la presión que ejerce La Rosaleda influye en una categoría como Segunda División?

Sí, creo que sí. La afición este año está sabiendo jugar los partidos. Sabe en qué momento necesitamos ese empuje. Un ejemplo claro de ello fue el día del Albacete. Para nosotros jugar en casa siempre es importante, es una delicia poder saltar a este campo. Sabemos que tenemos el apoyo de mínimo 20.000 personas y ver empujar a todos a favor del equipo se nota.

Se ha mostrado muy crítico por cómo está estructurada la Segunda División en cuanto a fechas, número de equipos, etc. Esta semana el Málaga vuelve a verse perjudicado por el virus FIFA y pierde a Munir, ¿debería la Liga 123 parar al igual que Primera División cuando haya partidos de selecciones?

Sí, es una liga de élite. Creo que está demostrado que la Laliga 123 está entre los 10 mejores campeonatos del mundo pese a que sea la segunda división de España. Creo que además favorecería a que los equipos invirtieran en jugadores de nivel. Hay muchos equipos de Segunda que no invierten en jugadores internacionales porque saben que los pierden para 10 ó12 partidos durante el año e incluso si es año de Copa África perderlos también durante el final de liga. Lo he dicho antes incluso de jugar en esta categoría, las cosas tienen que cambiar, creo que LaLiga 123 se ha quedado anticuada en cuanto a modelo. Me parece excesivo 42 jornadas, me parece excesivo tener que competir durante tantos meses, me parece excesivo que no haya parones de selecciones y eso tiene que empezar a cambiar ya.

¿Y con la AFE (sindicato de futbolistas) no se ha planteado todas estas cuestiones?

Sí, se ha hablado. Pero al final todavía no existe la unión entre LaLiga y la Federación para que vayan de la mano y ponen las cosas mucho más difíciles. Es que no lo puedo llegar a entender. Podrías conseguir que la competición tuviera más solera, que los equipos invirtieran más... Hay muchos equipos que se lo piensan, que van con el presupuesto justo y no apuestan por internacionales porque los pierdes durante muchos partidos.

Su última temporada en Segunda fue en el Nástic, el rival de mañana, ¿qué recuerdo guarda de esa época?

Jugué en el Nástic durante 6 meses y la verdad es que muy bien. Necesitaba jugar, necesitaba sentirme querido y allí lo tuve todo durante 6 meses.

El Nástic llega como colista a La Rosaleda. ¿Rival propicio o rival trampa?

Para nosotros cualquier partido siempre es complicado, ya lo hemos visto durante esta temporada, que hemos sufrido. Lo único que veo como propicio es que jugamos en casa y que venimos de dos partidos fuera. Para nosotros es un aliciente.

¿Hablamos de objetivos?

(Piensa). Aún es pronto. Todo el mundo espera que estemos ahí arriba. No te voy a decir en qué puesto. Nos gustaría estar ahí toda la temporada pero hasta marzo o abril no se va a ver de verdad el grupo que va a pelear. Es una liga muy igualada.

¿Considera que el Málaga tiene más fácil ascender por su categoría de recién descendido que otros equipos?

Es complicado. Lo único que puedes tener por haber bajado de Primera a Segunda es el seguro por descenso, que puede darte un mayor potencial económico. Pero también depende de cómo inviertas ese dinero y los conocimientos que tengas del mercado de Segunda. Es importante tener ese conocimiento y saber lo que te puede funcionar o no en la categoría.

Muchos compañeros suyos aseguran que no miran la clasificación, ¿usted?

Yo sí soy de mirarla. La miro, miro los partidos que quedan, miro el calendario, miro lo que le queda a los rivales... Lo hago porque me gusta estar informado y cómo van a ir las próximas jornadas. Yo tengo que decir que sí que la miro.

Y mirando la tabla, ¿le preocupa haber perdido puestos de ascenso directo después de tanto tiempo?

No. La liga está muy igualada. Entre el primero y el cuarto hay solo un punto de diferencia. Va a estar igualado hasta el final y sabíamos que podíamos enganchar una mala racha de partidos y bajar algunos puestos. Pero igual que pierdes puestos los recuperas rápido.

A usted le queda en el Málaga esta temporada y otra más, ¿piensa en seguir más allá de si se consigue el ascenso o no?

Me queda este año, otro más y uno más opcional. Me gustaría seguir aquí el mayor tiempo posible la verdad.

Ha jugado en 9 equipos como profesional, pero siempre en España, ¿no le pica la curiosidad de probar otro fútbol?

Sí, cuando más cerca estuve fue el verano antes de venir a Málaga, tuve la posibilidad de probar en otros países, de verdad me atraía y las sigo, pero llegó lo del Málaga y era una opción que a mí me gustaba desde hace mucho tiempo. Creo que para mí, para mi tipo de fútbol y para mi familia era lo mejor seguir en España.