El debate sobre el juego del Málaga CF de Juan Ramón López Muñiz está abierto casi desde que arrancó la pretemporada en julio. Independientemente de entrar en si el Málaga CF es un equipo que juega "feo" o no, lo cierto es que los números dan la razón al planteamiento del técnico asturiano: el Málaga CF lleva toda la Liga en zona de ascenso y varias semanas, incluida la actual, entre los dos mejores, en posiciones de ascenso directo.

La clave del éxito de este Málaga hasta la fecha no es, desde luego, su capacidad goleadora ni su facilidad para generar ocasiones en la portería contraria. Es evidente que este Málaga CF vive de su defensa y de su habilidad para no encajar goles.

De hecho, a día de hoy y junto al Granada, el Málaga CF es el equipo de LaLiga 123 que menos goles recibe de la categoría (18). O lo que es lo mismo, 0'69 tantos encajados por partido. Una faceta que en este 2019 se ha reforzado porque desde que dieron las 12 campanadas la pasada Nochevieja, el equipo solo ha recibido 5 goles y 3 de ellos fueron en la aciaga tarde de Reyes contra el Reus. El Almería y el CD Lugo, en ambos casos en La Rosaleda, son los otros equipos que han sido capaces de superar a Munir en este último mes y medio.

Otro dato espectacular: el Málaga CF no recibe un gol fuera de La Rosaleda desde el 8 de diciembre del pasado 2018. Desde entonces, ni Oviedo ni Zaragoza ni Tenerife ni Rayo Majadahonda has encontrado el candado para abrir la portería malaguista. Todo un logro en una categoría con tanta igualdad.

Aún hay un dato más para valorar. De las 26 jornadas disputadas, el Málaga ha dejado su portería a cero en 13 partidos, es decir, justo en la mitad de los choques de esta Liga.

Se da la circunstancia de que el próximo rival de los albicelestes, el Deportivo de La Coruña de Natxo González, atraviesa por una mala racha ofensiva justo ahora que tiene que rendir visita a La Rosaleda. El Deportivo contabilizó en su último partido ante el Nástic, el pasado fin de semana, 15 remates (seis entre los tres palos) y solo consiguió anotar un tanto. Algunas de las ocasiones fueron bastante claras, pero únicamente Edu Expósito con una virguería consiguió marcar. Quique González, su Pichichi con 11 goles, rehabilitado la semana anterior en Granada, volvió a mostrarse fallón ante el Nástic, igual que unos compañeros que no tuvieron claridad. Entre Cartabia, Borja Valle y el propio Quique malgastaron las mejores jugadas. Es de esperar que la pólvora del equipo rival siga mojada el domingo a partir de las 18 horas.