Posiblemente comienza el tramo más importante de la temporada, el necesario para coger impulso y llegar hasta el final con el viento a favor, subidos en la cresta de la ola. Para ello el Málaga debe estar preparado. Y Juan Ramón López Muñiz lo sabe. El técnico blanquiazul habló ayer en la previa del partido contra el Deportivo, un duelo contra un rival de pedigrí, y aunque intentó restarle presión al choque, no pudo evitar de catalogarlo de importante para el devenir del curso. No en vano, aún restarán 15 jornadas para el final.

El asturiano aludió a la importancia de jugar en casa. «Es importantísimo que vayamos todos a una, es fundamental. Desde el primer momento lo comentamos, que quedan partidos en casa muy importantes y con el ambiente a favor el equipo da un plus. Al final, los últimos partidos del campeonato lo vas a jugar en casa. El ambiente fuerte de ánimo en La Rosaleda será vital, un factor clave de aquí al final de la temporada», especificó sobre la caldera blanquiazul y sobre las movilizaciones que se están llevando a cabo para crear una atmósfera especial mañana domingo.

«Todos los puntos tienen una importancia vital ya. Si tienes una buena racha de resultados te pones arriba. El equipo mantiene una regularidad desde el inicio, aún así algunos mantienen el tirón. Hay que estar muy concentrados y muy atentos porque los partidos van a definirse por detalles, que te hacen sumar o no puntos», indicó sobre la relevancia del choque.

Y reiteró el afán de ayudar al equipo. «En la Segunda División hay que tener paciencia. Siempre me gusta rodearme de optimistas para que cuando me vean bajo, me tiren para adelante. El equipo ha dado señales de que hay que ser positivos con ellos. Da igual el equipo que venga, va a poner las cosas difíciles. Viene un equipo que aunque no esté bien, tiene individualidades y lo va a poner difícil», comentó sobre el rival, del que hizo más hincapié. «Es una plantilla hecha para estar en la parte alta de la clasificación. Con muy buenas individualidades. Con jugadores que tienes que estar muy atento porque te la pueden hacer. Te hacen estar en permanente alerta, ya que pueden desequilibrar un partido», explicó.

Muñiz deberá hacer una convocatoria complicada, con 23 jugadores disponibles, por lo que será peliagudo. «Las listas son normalmente complicadas porque la gente está trabajando muy bien. Es una base de optimismo. Y cada jugador que sale sabe lo que tiene que hacer, y sale en un buen momento de forma. Cuando haya un cambio es importante que aporte mucho. Es importante que todos se sientan implicados en la situación. El vestuario es grande y profesional. Juegue el tiempo que juegue tiene que ser un granito más en el equipo. Y cuando no juegue, en los entrenamientos. El vestuario empuja y suma desde el primero al último», comentó.

El asturiano habló también del juicio celebrado el pasado jueves entre Al-Thani y BlueBay, aunque no quiso mojarse demasiado. «Nosotros estamos aislados del juicio, son situaciones que no podemos resolver, nos tenemos que preocupar de las líneas blancas hacia adentro. Está todo controlado. Pensando que el tiempo que queda es poco y es mucho. Estamos centrados en nuestro trabajo», aseguró Muñiz.

De hecho, el presidente visitó al equipo en el entrenamiento de ayer. «Lo hemos visto, no he podido hablar con él, ver, pero ha hecho una visita al equipo y ha saludado a los jugadores».

Muñiz habló de otros nombres propios, como el de Adrián, que esta semana renovó su vínculo como blanquiazul. «Es una cosa positiva. Es un jugador implicado desde el primer momento. Siempre que haya un jugador así y con una duración larga en su contrato es bueno para él y para su familia. Y muy bueno para el club, que necesita a gente que sienta los colores. Sin importar si el tiempo es bueno o malo. Desde el primer día que me incorporé nunca hubo un pero por parte de él. Siempre ha aportado».

Y finalmente habló sobre Luis Hernández y Mula, que tuvieron un partido amistoso con el filial el otro día. «Jugaron el otro día 45 minutos porque consideramos que es importante para su progresión. Teníamos la suerte de que el filial jugaba contra un equipo, en un buen campo. Ya hemos visto que no tienen ningún problema. Hicieron 45 minutos buenos. Les sirvió», dijo.