El malaguismo invadió ayer la vecina Granada en una demostración de pasión y de amor por el Málaga CF. Miles de aficionados blanquiazules se desplazaron, desde primera hora de la mañana, hasta la capital nazarí, que acogió con lluvia y frío a la expedición malagueña. La climatología no impidió que se viviera un gran ambiente en los alrededores del Nuevo Los Cármenes en las horas previas. Una invasión pacífica que no tuvo que lamentar incidentes.

Ya durante el partido, los 3.000 aficionados blanquiazules también se hicieron notar en la grada. Conquistaron Fondo Norte y también se dejaron notar en buena parte de un estadio que colgó el «No hay billetes».