En una temporada llena de lesiones, sanciones y picos de rendimiento muy dispares, dar continuidad a un once en este Málaga CF se ha convertido en una apuesta de riesgo. De hecho, hasta la fecha el conjunto blanquiazul ha empleado 30 alineaciones distintas en 35 jornadas. Difícil dar continuidad a una idea con tanto disloque.

Ahora, sin embargo, el escenario se ha aclarado para que el nuevo Málaga CF de Víctor Sánchez del Amo que maravilló y goleó en Alcorcón tenga continuidad, como mínimo, mañana sábado ante el Mallorca.

Tras superar las pequeñas complicaciones que tuvo Keidi Bare al comienzo de la semana, el resto de componentes ha trabajado con total normalidad. Ha sido una jornada continuista sin sobresaltos, donde la tranquilidad y la felicidad de la victoria del pasado viernes en tierras madrileñas ha hecho mucho bien. Y sin caídas inesperadas y tras ver lo bien que funcionó la apuesta ante el Alcorcón, lo más sensato es pensar que jugarán los mismos ante el Mallorca.

Munir solventó el poco trabajo que tuvo. Si había dudas sobre si habría cambios en la portería con la llegada de Víctor y mirando hacia el futuro, la apuesta del madrileño es clara.

En la zaga, salvo sorpresa, Lombán seguirá en detrimento de Luis Hernández, que deberá esperar en el banquillo -el avilés tiene cuatro amarillas y está apercibido de sanción, por lo que podría no ser tarde-. Cifu, Pau y Ricca seguirán. Keidi ya superó sus molestias de comienzo de semana y apunta a seguir siendo el ancla del equipo. N'Diaye y Adrián leyeron a la perfección la idea de Víctor y Blanco Leschuk es el único que hay para el ataque.

En las bandas, tras el magnífico partido de Ontiveros y Renato, sería insensato a la par de injusto cambiarlos. Todo ello mientras que Harper se ha caído por lesión y mientras Erik Morán y Pacheco siguen en la enfermería, al igual que Koné.

Hoy hablará Víctor aunque podría dilatar su convocatoria hasta mañana. Pero esconderá pocas sorpresas.