El lateral del Málaga Juan Carlos Pérez 'Juankar' reapareció el lunes después de ocho meses lesionado en un partido en el que se llevó una doble alegría por la goleada de su equipo al Real Oviedo (3-0), que le devuelve a los puestos de promoción de ascenso, y la "espectacular" ovación que le tributó la afición malaguista.
El madrileño fue titular en La Rosaleda, en el encuentro de la jornada trigésima octava de LaLiga 1/2/3 ante un rival directo como el ovetense, y, después de su calvario con las lesiones, jugó durante 60 minutos por la banda izquierda del conjunto malaguista hasta que fue sustituido por Diego González.
Juankar disputó su último partido con el Málaga el pasado 15 de septiembre frente al Córdoba (3-0), también en La Rosaleda, y a partir de ahí empezó a darle problemas la rodilla izquierda hasta que fue intervenido de una rotura del ligamento cruzado anterior el 5 de noviembre.
El exmadridista, de 29 años y que llegó a debutar con el primer equipo merengue en la campaña 2010-11, arrastraba esa dolencia desde casi un año antes, en concreto desde que tuvo que retirarse con problemas en dicha articulación en un encuentro contra el Real Madrid en el Santiago Bernabéu, el 25 de noviembre de 2017.
Finalmente, el lateral zurdo de Boadilla del Monte fue operado, pero no del ligamento cruzado, aunque sus sensaciones en el periodo de recuperación fueron bastante malas.
En la siguiente campaña realizo la pretemporada, jugó los primeros partidos, pero volvió a ser operado en Málaga, esta vez por una rotura del ligamento cruzado que, según el parte médico facilitado entonces, requirió "una plastia de cruzado con tendón de pata de ganso", además de "una regularización del menisco externo".
Juankar ha regresado ahora para disputar los últimos partidos del campeonato y una hipotética promoción de ascenso con el Málaga, en un momento en el que su equipo es quinto, igualado a 62 puntos con el sexto, el Cádiz, y a nueve del último puesto de ascenso directo que ocupa el Granada cuando sólo faltan doce por disputarse.
Tras su reaparición, el también exjugador del Sporting de Braga, Zaragoza, Betis y Granada se mostró "muy contento" y "con buenas sensaciones", aunque reconoció que "físicamente" estaba "muerto".
"Hay músculos que me duelen que ni sabía que tenía, como le dije a mis compañeros en el vestuario", declaró a los periodistas el madrileño.
Además, calificó de "espectacular" y de "muy emocionante" los aplausos con los que lo despidió el malaguismo tras ser sustituido. "La gente me quiere mucho. Han sido seis meses muy duros, tuve un subidón con esa ovación. Lo mejor para mí de la noche es eso", recalcó Juankar después de ocho meses en el dique seco.
