El entrenador blanquiazul, Víctor Sánchez del Amo, destacó en la rueda de prensa posterior al Albacete-Málaga el gran trabajo de sus jugadores y el apoyo que sintió por el medio centenar de aficionados malaguistas desplazados hasta el Carlos Belmonte. "Hoy hay que felicitar a todos, a los jugadores y también a la afición que tenía un desplazamiento previsto para el domingo".

Con respecto al partido, Víctor admitió que el conjunto de Ramis "tiene mucha capacidad, hemos estado muy bien defediendo las situaciones en inferioridad y hemos tenido ese puntito de suerte con balones de segunda jugada".

Asimismo, para el míster la expulsión de Gustavo Blanco marcó un punto de inflexión en el choque. "Hay dos partes del partido, una con el 0-2 y luego otra con la expulsión de Gustavo". La doble amarilla que supuso la expulsión del nueve argentino enfadó bastante a Víctor e hizo que se alterasen sus planes. "He pedido el cambio al cuarto árbitro, no nos ha concendido la oportunidad y en la jugada siguiente ha venido la expulsión de Gus. Me conocéis, me controlo bastante, tengo el máximo respeto por los árbitros pero me he puesto nervioso", señaló. "Da mucha rabia porque lo ves venir, ya estaba preparado Hicham para salir por Blanco".

No obstante, Víctor destaca que sus jugadores han "mantenido la templanza" en un partido complicado de gestionar. Con esa calma, confianza y exigencia, el entrenador madrileño la logrado lavar la cara del Málaga CF e inyectar la garra y el coraje que parecían perdidos. Algo fundamental para afrontar los próximos play off de ascenso a Primera Divisón.