José Luis Pérez Caminero tiene tarea extra para los próximos días. El director deportivo blanquiazul, con contrato hasta el 30 de junio de 2021, tiene un largo verano por delante con decenas de operaciones por concretar para ajustar la plantilla blanquiazul de cara a la siguiente campaña. Lo primero de todo, que debe concretarse en pocas jornadas, es definir el nombre del técnico que se sentará en el banquillo blanquiazul la temporada 2019/2020 y acelerar la operación salida, con el fin de aligerar la masa salarial.

Lo primordial en estos momentos para los dirigentes blanquiazules es saber quién se hará cargo del equipo el próximo curso. La primera opción sigue siendo Víctor, quien espera reunirse con el director deportivo estos días para conocer con más detalle las líneas maestras del proyecto y que se le presente una oferta económica formal y por escrito. Ahí será el madrileño el que deberá decidir si acepta el cargo o bien Caminero debe peinar el mercado de entrenadores disponibles para llegar al banquillo blanquiazul. A lo largo de esta semana, a lo más tardar la siguiente, debe concretarse el entrenador.

Además de eso, es fundamental que el Málaga empiece a dar salida a jugadores con los que sabe que no podrá contar el próximo curso, bien por su alta ficha, por cláusulas en su contrato o porque un traspaso a otro club pueda alegrar las arcas de Martiricos. Así las cosas, las muchas operaciones de entrada y salida que se acometerán se irán sucediendo a lo largo de un intenso verano y las primeras deben ser oficiales en los próximos días.

Aparte de la renovación de Cifu hasta 2022, confirmada ya por el club días atrás, no se ha dado oficialidad a ningún movimiento más dentro de la primera plantilla blanquiazul, aunque ya hay certezas de que hay jugadores en la rampa de salida con su futuro prácticamente resuelto, como son los casos de Jony Rodríguez y Brezancic. El extremo asturiano está cerca de marcharse al Lazio romano en calidad de cedido en su último año de contrato, lo que hará que el Málaga no viera ni un solo euro por un traspaso y salga gratis en el verano de 2020. Igual de decidido está el futuro del serbio Brezancic, que se irá libre al Partizan, como ya confirmó su entrenador Savo Milosevic. El único beneficio para la entidad de estas dos operaciones será el ahorro de sus fichas. Donde si ingresará la entidad costasoleña será con la venta por 1,5 millones de euros de Jack Harper al Getafe.

Detrás de estos deberán salir muchos más. Hay un buen número jugadores con un salario demasiado elevado para la capacidad financiera del Málaga CF la próxima temporada en Segunda y el club deberá buscarles destino mediante distintas formulas. Jugadores como Ricca, Luis Hernández, Juanpi, Miguel Torres y otros de los muchos cedidos que regresan ahora deberán abandonar la disciplina blanquiazul para poder armar un equipo competitivo dentro de las posibilidades económicas y del límite salarial establecido por LaLiga.

Es la hora de tomar decisiones por parte de Caminero y su equipo de trabajo. Llega el momento clave de la temporada para planificar y acertar en lo que debe ser un proyecto estable que lleve al Málaga CF a Primera División al segundo intento. El futuro del club está ahora en manos del director deportivo madrileño y de las del jeque Al-Thani, que siempre tiene la última palabra en cada movimiento.