Sadiku, goleador: 8

Peligroso en el área pequeña. Lo intentó en varias ocasiones desde el pitido inicial, realizó un par de remates buenos pero no marcó hasta el penalti concedido al Málaga. Octavo gol desde que llegase a la disciplina malaguista.

Munir, cruz: 1

Salvó un par de ocasiones claras de gol del conjunto carbayón, pero lo cierto es que en el 1-0 de Sangalli cometió un error garrafal y pudo hacer muchísimo más. Dicho fallo mermó su confianza en el resto del partido.

Cifu, correcto: 5

Otro buen partido del lateral granadino, que sigue siendo uno de las grandes bazas de Víctor. Lleva varios partidos sin ser tan decisivo en ataque como en ocasiones anteriores, pero se mostró luchador y centrado en las labores de contención.

Luis Hernández, sólido: 6

Con el madrileño, la defensa del Málaga CF está a buen recaudo. De vuelta tras sanción, el central se mostró sólido, equilibrado y contundente en sus tareas y acertado en los balones en largo para iniciar el juego ofensivo.

Diego González, acertado: 6

El gaditano está recuperando sensaciones y con partidos como el de hoy, le demuestra a Víctor Sánchez del Amo que con minutos de juego logra mayor confianza. Se mostró acertado, atrevido y decidido a lo largo de todo el encuentro.

Mikel Villanueva, serio: 5

El vinotinto culminó un buen partido en el lateral izquierdo, cometió muy pocos fallos y estuvo muy acertado en sus labores. Llegó incluso a marcar un gol, aunque no subió al marcador por fuera de juego.

Keidi Bare, guía: 6

Muy buen partido del albanés. Fue uno de los jugadores que más tocó el esférico, asumiendo riesgos cuando era necesario y hábil en las tareas de contención. Puso un gran pase muy preciso a Mikel en el tanto que no subió por fuera de juego del venezolano.

Ramón, discreto: 4

Primer partido como titular y no consiguió realizar un buen encuentro. Intenta aportar equilibrio, pero le sigue faltando calidad a la hora de la asociación. Fue el primer jugador sustituido.

Renato, impreciso: 4

La calidad del portugués se difumina semana a semana, sobre todo cuando se acerca a los metros finales de campo en los que podría aportar más, pero no es capaz de asociarse ni apoyarse en sus compañeros. Él solo tampoco puede.

Pacheco, irregular: 5

Partido de idas y venidas de pizarreño. Estuvo acertado en el juego interior, pero no se lograron optimizar sus acciones. No logró ser constante ni regular durante todo el partido, su participación fue discontinua.

Antoñín, luchador : 5

El desarrollo del canterano es más que notable y continúa creciendo. No hay partido en el que no pelee como el que más, le sobra coraje y entrega, solo le faltan apoyos y precisión en los últimos metros del campo.