La temporada del Málaga CF desde que Sergio Pellicer recaló en el banquillo local de La Rosaleda ha sido de notable, tirando a sobresaliente. Envueltos en un ruido institucional constante, e incluso con una pandemia mundial de por medio, el conjunto blanquiazul ha logrado la permanencia en Segunda División de la mano del técnico castellonense, terminando la campaña en 14ª posición, salvándose a falta de una jornada y con varias cifras muy destacables.

Sin quitar mérito al trabajo de Víctor Sánchez del Amo al frente del equipo hasta que fue destituido tras el escándalo por el vídeo de contenido sexual -despido que el club asumió como improcedente hace unos días-, los números de Sergio Pellicer, dadas las circunstancias, son más que meritorios. Desde que recaló en el banquillo blanquiazul, en la jornada 23, el Málaga ha sido, con 30 puntos en 20 partidos, el cuarto mejor equipo del campeonato, a falta de la disputa del Deportivo-Fuenlabrada. Pase lo que pase en dicho encuentro, el equipo terminará este tramo de la competición como poco en quinta posición, lo que significaría estar en puestos de play off.

Solo hay tres equipos que han sido mejor que el Málaga desde el desembarco de Pellicer en el primer equipo: Huesca (34 puntos), Tenerife (33) y Girona (32). Después ya aparecen el cuadro blanquiazul (30), el Oviedo (30), el Lugo (30) y Deportivo de la Coruña, también con 30 y un polémico partido por disputar.

Hablar de qué hubiera pasado si Pellicer hubiera estado desde el inicio de temporada en el banquillo sería hacernos trampas al solitario. Esa no es la realidad. Pero lo cierto es que los números del equipo han mejorado en muchos aspectos, principalmente, en los puntos logrados: con Pellicer se han sumado 30 puntos en 20 partidos (1,5 por encuentro), mientras que con Del Amo se lograron 23 en 22 (1,04 por encuentro).

Además, el cuadro de Martiricos ha terminado el curso mostrando su mejor cara como bloque en defensa. Ha sido el equipo menos goleado del campeonato (33) y Munir. Con Pellicer, los blanquiazules solo han concedido 13 goles en 20 partidos (0,65) y han conseguido dejar la puerta a cero en 12 ocasiones. Antes, con Víctor, ya se había conseguido en siete ocasiones, para un total de 19 (el 45% de los partidos ligueros).