La Liga SmartBank se prepara para una temporada apasionante que contará con tres clubes históricos que regresan a la categoría, Cartagena, Sabadell y Castellón; quince con experiencia en Primera (Málaga CF incluido), de los cuáles al menos una decena aspiran al ascenso, y uno nuevo, el Logroñés.
Será la tercera campaña seguida del Málaga CF en Segunda División. Tras rozar el ascenso en la primera y sufrir hasta las últimas jornadas para salvar la categoría, la pasada campaña, es una incógnita a qué podrá aspirar el equipo dirigido por Sergio Pellicer en esta liga que arranca este fin de semana para los de Martiricos en el Heliodoro Rodríguez López de Tenerife.
La gran novedad de LaLiga SmartBank Su presencia en Segunda División permitirá que el mítico estadio de Las Gaunas vuelva a albergar un partido liguero de fútbol profesional más de veinte años después. El último fue el 4 de junio de 2000, frente al Villarreal, en Segunda, que consumó su descenso a Segunda B.
Junto al Logroñés vuelven a Segunda el Cartagena -ocho años después-, el Sabadell -cinco- y el Castellón -diez-, que esperan reverdecer antiguos éxitos con proyectos ilusionantes que seguirán dirigidos en el banquillo por los mismos inquilinos de la pasada campaña. El único objetivo de los tres debe ser sumar 50 puntos para mantener su estatus en Segunda. Todo lo que venga a mayores será un premio para ellos y para sus aficionados.
Los que también regresan a Segunda, pero tras descender de Primera, son el Leganés, Mallorca y Espanyol. Al conjunto balear su alegría por jugar en Primera solo le duró un curso y ahora, con Luis García Plaza a los mandos, espera pelear por volver a la máxima categoría lo antes posible, igual que el Espanyol, que no competía en Segunda desde 1994 y que se presenta como candidato firme a volver a Primera el próximo verano. Mantiene una buena plantilla y su imagen en la pretemporada hace ser optimistas a los aficionados pericos de que el paso por el «infierno» sea fugaz.
El Leganés, por su parte, con jugadores como Borja Bastón o el mediapunta internacional japonés Gaku Shibasaki deben dar un salto de calidad a la plantilla pepinera para luchar también por el retorno a la elite.
Muy cerca de Primera la última campaña se quedaron el Almería, el Zaragoza y el Girona, que quieren volver a pelear por el ascenso. De los tres, el que más se ha reforzado es el conjunto aragonés, que ha incorporado a varios futbolistas, entre ellos el excapitán malaguista Adrián González, para la nueva plantilla dirigida por Rubén Baraja, que tiene la difícil misión de hacer olvidar a Víctor Fernández.
Otro aspirante al ascenso es el Rayo Vallecano, que mantiene a su plantilla a una buena nómina de internacionales de renombre como el delantero argentino Leo Ulloa, el defensa peruano Luis Advíncula, el centrocampista español Mario Suárez, el central uruguayo Emiliano Velázquez y el portero macedonio Stole Dimitrievski. A todos los dirige Andoni Iraola, que la pasada temporada realizó muy buena campaña, con semifinal de Copa del Rey incluida, al frente del Mirandés, otro de esos equipos sin tanto glamour como la mayoría de los que comparte categoría y que tratará de hacerse fuerte en su fortín de Anduva para no pasar muchos apuros.
Sporting, Tenerife y Oviedo, tras una temporada para olvidar en la que por momentos coquetearon con el descenso a Segunda B, no quieren que esos apuros se vuelvan a vivir.
De los tres, el único que mantiene su confianza en el técnico que los guió a la permanencia es el Oviedo, que sigue con el veterano exfutbolista José Ángel Ziganda a los mandos. El Sporting, el único equipo sin ninguna incorporación de toda la categoría en este mercado estival, comenzará el curso con solo catorce jugadores de la plantilla de la pasada campaña.
El Tenerife es otro de esos históricos a los que les está costando salir del pozo. El cuadro chicharrero buscará una temporada más engancharse a los puestos de arriba para tener opción de dar la sorpresa y regresar a LaLiga Santander.
El Alcorcón arranca el torneo con el objetivo de intentar no sufrir y de ser más regular de lo que se ha mostrado estas últimas temporadas. El Fuenlabrada, por su parte, tras el convulso final de liga vivido hace solo un mes, vuelven a la competición avalado por las buenas sensaciones dejadas en pretemporada y con la intención de volver a sorprender colándose en la zona medio-alta de la tabla.
La UD Las Palmas de Pepe Mel no contará en sus filas con sus tres jugadores más determinantes del último curso, Pedri, Rubén Castro y Nárvaez. El equipo canario todavía busca en el presente mercado estival al sustituto en ataque de Castro, autor de 15 tantos la pasada campaña 19/20. De si lo encuentra o no dependerá la suerte de su temporada.
El Albacete pasó muchísimos apuros la última campaña y hasta la última jornada no pudo disfrutar del alivio que supuso una permanencia agónica. Para esta, y conscientes de la dificultad de Segunda, lo principal es sumar los cincuenta puntos y después soñar.
A ese sueño quiere aferrarse, aunque con cautela, la Ponferradina, que comenzó muy bien la pasada campaña, llegó al ecuador del campeonato undécimo y acabó la última jornada salvado solo por la mejor diferencia de goles con el Deportivo. Tras el descenso del conjunto coruñés, el único representante gallego es el Lugo, que afrontará su novena temporada consecutiva en Segunda con el único objetivo de seguir asentado en la categoría y que tiene este curso al extremo panameño José Luis Rodríguez, «El Puma», como incorporación más destacada.
Por delante 42 jornadas apasionantes hasta el 30 de mayo y, si se cumplen los pronósticos de las últimas temporadas dada la igualdad de la categoría, la emoción estará servida hasta el último día, tanto por arriba como por abajo.
