"Las victorias y las derrotas duran 24 horas", así de claro ha sido Pellicer en la rueda de prensa previa al choque de mañana ante el Mirandés. El técnico de Nules no esconde la alegría por las dos últimas victorias consecutivas, pero no se le despegan los pies del suelo y continúa con su idea de que el trabajo está por encima de todo. "Nos tenemos que dar cuenta de que para competir tenemos que afrontar el ritmo alto. Y mantenerlo los 90 minutos. Es repetitivo, pero es verdad. Es trabajo y humildad. Y preguntar por qué están pasando las cosas", apuntó el míster.

"La suerte hay que buscarla con trabajo. La continuidad del trabajo y darnos cuenta por qué suceden las cosa, eso es lo importante, más allá del resultado. Somos un equipo muy solidario a nivel defensivo, y sabemos cuándo hacer las transiciones. Cada partido es un mundo diferente y estamos en un continuo reciclaje. Tenemos un equilibrio, máxima exigencia y máximo esfuerzo para conseguir las victorias", valoró Pellicer.

Sobre el Mirandés, rival de mañana a las 20:30 horas en La Rosaleda, el míster apuntó que es un equipo "nuevo completamente, con muchos cambios. Este año también han cambiado hasta el entrenador. Han ganado dos partidos fuera de su estadio y perdieron solo contra el Espanyol. Es un equipo que empezó muy bien, muy dinámico en ataque y que está en fase de construcción, con hambre e ilusión. Ahora tenemos un partido que nos va a exigir otro registro y tenemos que estar muy fuertes".

Para el próximo choque, el estado de la enfermería es bastante parecido al de la última jornada: "Matos ya se entrenó ayer y esperemos que hoy también. Joaquín, Ismael o Hicham no van a estar y vamos a ver la semana que viene cómo siguen su proceso". En cuanto al resto de jugadores del plantel, aseguró que tras el entrenamiento valorarán como están "pero en principio tanto los que participaron como los que fueron convocados no tenemos ninguna baja".