El conjunto blanquiazul parece haberse ya recuperado del varapalo que supuso el pasado fin de semana la derrota en casa frente al recién ascendido Cartagena. Hay que aprovechar la «rabia» que el míster de Castellón afirmó tener el pasado sábado, a sabiendas de lo importante que hubiese sido seguir en racha positiva y entrar en los puestos de playoff . La buena noticia para esta semana es que el Málaga juega fuera de casa, donde hasta la fecha ha conseguido mejores resultados. La mala es que se enfrentará a un Almería que no quiere peder el ritmo en busca de la promoción a la categoría reina.

En las últimas horas están llegando buenas noticias a Martiricos en forma de recuperación. Eran muchos los jugadores importantes que han tenido que pasar por la enfermería en estas semanas y cada vuelta al trabajo en grupo es un alivio para Pellicer y sus ayudantes. Los regresos más destacados en la jornada de ayer fueron los de Escassi, Chavarría, Jairo Samperio y Benkhemassa, el único que por ahora tiene que continuar con su proceso de recuperación es Juande, que ayer realizó ejercicios específicos y salvo milagro está baja el próximo domingo en el Estadio de los Juegos Mediterráneos.

A los blanquiazules le quedan todavía dos entrenos más para valorar la situación y analizar en qué punto llegan los jugadores que están tocados. Ya ha comprobado en ocasiones anteriores que es preferible dar unos días más de descanso para prevenir que tener que lamentar más adelante lesiones mal curadas.

Pero en líneas generales son días optimistas en el seno blanquiazul. El equipo aún tiene margen de mejora, sobre todo cuando juega entre los muros de La Rosaleda, y pese a todo sigue a pocos puntos de los puestos de liguilla de ascenso a Primera. Aunque saben que hay que ir a paso, lo primero es la salvación.

Muestra de la buena sintonía que hay en el club son las visitas que a lo largo de esta semana Manolo Gaspar, director deportivo, y el administrador judicial José María Muñoz han hecho tanto a los jugadores del primer equipo masculino como femenino. Sobre el conjunto de Pellicer, los dirigentes resaltaron que pese a la gran renovación que ha sufrido la plantilla han conseguido formar «una piña malaguista». Por otra parte, a las de Nati Gutiérrez les quisieron dar un mensaje de tranquilidad, alegando que desde los despachos están convencidos de que «vamos a ir para arriba» ya que están en un momento «de crear bases y tenéis ganas de seguir creciendo».

Al borde de la sanción

De entre todas las cuestiones a trabajar en la preparación del próximo choque liguero ante el conjunto almeriense, Pellicer tendrá que tener muy en cuenta que tiene a tres jugadores de vital importancia en una situación delicada. Luis Muñoz, Yanis Rahmani y Joaquín Matos acumulan hasta el momento cuatro cartulinas amarillas y están solo a una y ser sancionados con un partido. Un problema añadido a la hora de planificar un duelo de gran exigencia con una plantilla que no se caracteriza por su larga extensión.

Además, ante el Almería ya será baja Yanis por la llamada «cláusula del miedo» que hará que también se atrase un poco más el partido en el que pueda llegar esta quinta amonestación. Pero independientemente de esta situación, el trabajo del francoargelino en la sesión de ayer se centró el trabajo de prevención debido a la sobrecarga de minutos que tiene tras la última maratón de partidos del pasado mes.

No sería la primera vez en esta temporada que el cuerpo técnico malaguista tiene que lidiar con esta situación, ya que tanto Juande como Pablo Chavarría, otras dos piezas claves en la defensa y el ataque del conjunto de Martiricos, ya se tuvieron que perder un encuentro por esta misma razón.

Cristo González, al Mirandés

Otro jugador que seguro que no formará parte del Málaga a corto plazo es Cristo González, pretendido este verano y que finalmente se marchó al Udinese de la Serie A. El delantero tinerfeño no ha cuajado en la liga italiana y llega al Mirandés cedido para lo que queda de temporada. En el club de Martiricos intentaron hasta el último día hacerse con sus servicios pero por falta de acuerdo con la entidad de Udine, finalmente se fichó a Joaquín. Así, Cristo ha pasado de pretendiente a próximo del equipo costasoleño esta campaña.