50 puntos: el empate más dulce para el Málaga CF (1-1)

A pleno pulmón, así puede respirar el Málaga CF con 50 relucientes puntos en su mochila. Hubo que trabajar, tener la concentración al 200% y que la suerte sonriera. El Mallorca no lo puso fácil pero todo esfuerzo tiene su recompensa y los blanquiazules, por fin, han recogido los frutos de una durísima campaña en lo deportivo y lo institucional.

Fiel al estilo mostrado en los últimos meses, los de Pellicer saltaron al verde de La Rosaleda con ganas de llevar la iniciativa. No habían pasado ni diez minutos desde el pitido inicial cuando Manolo Reina, viejo conocido blanquiazul ahora en las filas del Mallorca, tuvo que intervenir en dos ocasiones. Si la segunda acción hubiese quedado invalidada por fuera de juego, en la primera hubo una mano clarísima que unos minutos después fue revisada por el colegiado, que incluso acudió al VAR para comprobarlo. Pocas han sido las situaciones en las que el videoarbitraje se ha puesto del lado malaguista, pero esta vez por fin sí, era clarísimo. Y el capitán Lombán no desaprovechó la ocasión y, con un disparo raso y acertado, convirtió la pena máxima en el 1-0. 

Los de Pellicer se vinieron arriba con el gol a favor y poco después Jairo en solitario trató de complicarle la vida a Reina, pero Oliván despejó la acción. Pero el Mallorca fue paulatinamente ganando territorio y obligando a Juan Soriano a ser protagonista. Sedlar, a escasos centímetros del guardameta blanquiazul, remató con peligro pero el meta logró sacarla. Y al borde de la media hora, Sastre condujo el balón desde la banda y puso un centro con escuadra y cartabón para que Lago Junior rematase de cabeza y devolviese las tablas al luminoso. 

De menos a más, los de Luis García Plaza tuvieron diferentes ocasiones muy claras en lo que restó de primer tiempo. Amath se escapó entre Lombán e Isma, Ndiaye a pase de Oliván también puso contra las cuerdas al portero del Málaga, al igual que Valjent con un remate de cabeza que se marchó desviado. 

Acabó la primera mitad con un buen empate para los de Martiricos después de las numerosas embestidas del Mallorca, sobre todo en los últimos instantes. 

Para el segundo asalto, Pellicer movió el banquillo en busca de pólvora con la que mantener el nivel ofensivo pero también buscar algo más en ataque: Luis Muñoz, Yanis y Cristo en lugar de Matos, Jairo e Isma Casas. 

Nada más entrar, el Rahmani colaboró en una jugada ofensiva blanquiazul, ayudando a Caye Quintana a buscar la portería bermellona aunque sin éxito.

Lago Junior buscó el doblete en una jugada combinada con Ndiaye, su compañero se la dejó en el área chica para el remate, Juan Soriano estaba un pelín adelantado pero llegó rápidamente Juande a despejarla. 

El encuentro se convirtió en un toma y daca que podía desequilibrar el partido por ambos lados. Caye tuvo una muy buena internada pero en solitario, llegó rapidísimo desde atrás Luis Muñoz, pero el malagueño sin mucho margen de reacción erró en el remate. 

Salva Sevilla fue un peligro constante, con lanzamientos en largo o asistiendo. A 10 minutos para el final, con él como pasador, Soriano hizo otro paradón a Amath para mantener el empate.

Sin dejar de sufrir, pero Bien en defensa y ataque ante un rival de categoría. Ahora sí, a festejar: Pellicer, los profesionales y los filiales ya tienen su medio centenar de puntos. ¡Objetivo cumplido!