Málaga CF: Cinco claves para salir de la crisis

Solo hay que mirar la clasificación y la trayectoria del equipo en las últimas semanas para comprobar que el Málaga CF está inmerso en una crisis de resultados que le ha llevado a vivir un tercio final de campeonato complicado. El cambio de entrenador todavía no ha tenido el efecto deseado, las victorias no llegan y ahora mismo el pesimismo inunda al malaguismo, pero todo puede cambiar con solo un resultado positivo, un golpe de timón que haga a los jugadores recuperar la confianza en sí mismos y a la afición volver a creer en esta plantilla, que son los mismos que han agradado en muchos partidos este curso. La receta para salir de este mal momento está clara: unión. Todos los estamentos del club deben empujar en el mismo sentido, desde jugadores, cuerpo técnico, directiva y afición, un pilar fundamental de esta entidad.

Unión ante el mal momento

En esta situación compleja en la que se ha metido el equipo es fundamental que todas las partes del club remen en la misma dirección. Jugadores, cuerpo técnico, directiva y hasta la afición tienen que ir a una para sacar la temporada adelante. La entidad debe ser una piña. Y el primer momento para demostrarlo debe ser este lunes en el encuentro en La Rosaleda frente al Cartagena. El conjunto blanquiazul necesita el apoyo de su gente. La hinchada boquerona gana partidos o al menos ayuda a conseguirlo. Su ausencia se notó notablemente durante la pandemia. Ahora es el momento de apretar, luego habrá tiempo para análisis y reproches a final de curso.

Recuperar la confianza

La plantilla está inmersa en una falta de autoestima preocupante de la que debe salir cuanto antes. Estos jugadores son los mismos que en esta misma temporada han maravillado a La Rosaleda con partidos donde han llegado incluso a ilusionar con pelear por el play off. Los jugadores deben recuperarse anímicamente para poder dar el 100% y ahí entra también el trabajo del entrenador, Natxo González. Los jugadores deben liberarse de la presión y volver a disfrutar sobre el césped. Los atacantes deben ir en busca de sus rivales como han demostrado que saben hacerlo, los zagueros recuperar su fortaleza con y sin el balón y bajo palos, juegue el que juegue, debe haber un líder que mande desde atrás. No se les ha podido olvidar jugar al fútbol en tan pocos meses. La calidad para competir contra cualquier equipo de la categoría y en cualquier plaza la tienen, ahora toca que vuelvan a creer en ellos y vuelvan a ofrecer su máximo nivel.

Una victoria balsámica

Muchas veces el método para salir de una crisis deportiva es tan simple como que la pelotita quiera entrar. El Málaga necesita ese resultado favorable que le haga respirar en la tabla y poder volver a afrontar los encuentros con mayor tranquilidad y sin la presión asfixiante de verte cerca de los puestos de descenso. Todo puede cambiar con una victoria y el lunes hay una nueva oportunidad para conseguirla. Tres puntos pueden hacer que todo se vea diferente. Los jugadores se vendrán arriba y la afición volverá a conectarse y a creer en los suyos. La parroquia blanquiazul ya ha demostrado en muchas ocasiones que necesita muy poquito para convertirse en ese jugador número 12.

Recuperar lesionados

No es el único motivo por el que el Málaga ha llegado a esta situación casi límite, por supuesto, pero las lesiones han lastrado al equipo durante toda la temporada. Cortar de raíz con esta mala racha de problemas físicos también ayudaría al equipo y Natxo González a tener más armas durante los partidos. Juande es un jugador fundamental que ahora vuelve a estar lesionado y el equipo necesita recuperarlo cuanto antes. En un par de semanas podría volver si no hay otro paso atrás. Genaro Rodríguez también fue pieza fundamental con José Alberto durante muchos encuentros, ahora sigue con su recuperación del menisco y en un mes podría estar ya ultimando su puesta a punto. Pablo Chavarría ya está de vuelta y poco a poco irá entrando en las alineaciones. También afectó, y de qué manera, la lesión de ligamento cruzado de Luis Muñoz, que tiene difícil volver a competir al 100% este curso. La enfermería tiene que ir vaciándose poco a poco para que la plantilla vuelva a disponer de todo su potencial.

Tranquilidad

Mantener la mente fría quizás sea lo más complicado para todos en estos momentos. Miras la clasificación y la dinámica del equipo y te echas a temblar, pero ahora es el momento de demostrar profesionalidad y sacar el curso adelante a base esfuerzo y sacrificio. En la plantilla hay jugadores con experiencia en situaciones similares que deben saber transmitir a los más jóvenes esa templanza para dejar a un lado la ansiedad a la hora de saltar al verde.

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