LaLiga SmartBank

El Málaga CF, más al límite que nunca desde que está en Segunda

El cuadro malaguista vivirá su peor situación en cuatro años, con poco margen de maniobra

El cuadro malaguista fue incapaz de romper el muro ovetense este pasado sábado. | GREGORIO MARRERO

El cuadro malaguista fue incapaz de romper el muro ovetense este pasado sábado. | GREGORIO MARRERO / f. extremera

Fran Extremera

Fran Extremera

El empate cosechado este pasado sábado en La Rosaleda ante un Oviedo que lucha por el ascenso tiene muchas lecturas. Pero la única realidad, la que no atiende a especulaciones, es la de la grave situación clasificatoria a la que se enfrenta el Málaga CF de cara a sus últimas tres jornadas ligueras. Nunca en este último lustro fuera de Primera estuvo tan al límite de caer a la tercera categoría del fútbol español.

Ni el empuje de un campo abarrotado, con la ilusión que inicialmente había despertado Guede al mejorar la imagen del equipo, fue suficiente para lograr una victoria ya vital para atar lo antes posible esa ansiada salvación. Y más allá de lo que la plantilla actual ofrece, lo que verdaderamente preocupante para los dirigentes malaguistas, es la evolución de un filial de toda una Real Sociedad, capaz de encadenar nueve puntos seguidos y de convertirse en el peor enemigo posible para la recta final.

Todo o nada a tres encuentros. El escenario es propio de una película de terror, porque encima no es visita nada cómoda la que espera para el próximo fin de semana. En Tenerife aguarda, de nuevo, un rival inmerso en esa lucha por volver a Primera que tanto se añora en Martiricos.

Y de nuevo da una lección toda la masa social malaguista. Porque por difícil que se pongan las cosas en el seno del club, por imposible que pueda resultar la empresa a alcanzar, más de sí mismo saca la tan sufrida afición blanquiazul. El ejemplo de esta semana lo establece la peña malaguista Conejito de Torrox «Duda 17».

Anoche ya habían atado de urgencia el viaje relámpago a las islas canarias, de cara al choque de este próximo domingo a las 21.00 horas (horario no unificado), con al menos 70 abonados y simpatizantes. Todo por el Málaga CF, como reza el lema de un colectivo que a lo largo de más de una década fue capaz de celebrar en su municipio o en el extremo más occidental del litoral, en Estepona, importantes convivencias que sirvieron para cohesionar más a la afición blanquiazul.

Si miramos al calendario que le espera a los pupilos de Pablo Guede, el desplazamiento a Tenerife es el que más temor depara. Y en este sentido, hasta una derrota frente a un contrincante inmerso en ascender de categoría, podría compensarse con la difícil papeleta de una Real Sociedad B que recibe a una UD Almería con el ascenso de manera directa en juego.

Este último duelo se juega el viernes, con lo que hasta podría el Málaga CF especular en parte con ese tanteo. Así la clasificación, el equipo mira de reojo a lo que depare la siguiente jornada, ya con el horario unificado, y ese enfrentamiento contra un Burgos en tierra de nadie. La Rosaleda tendrá que volver a convertirse el sábado 21 de mayo, a partir de las 21.00 horas, en ese mismo fortín de anteriores campañas.

Más que nunca deberá ser vital el apoyo de la grada para poder alejar cuanto antes unos fantasmas del descenso que son inéditos para este Málaga CF. Ni siquiera en las últimas campañas, con el límite salarial que dejó esquelética de efectivos la plantilla, ha sufrido tanto el aficionado blanquiazul.

Este aspecto es más que destacable. Porque en esta temporada de tres entrenadores y otros tantos desencantos, con cantos de sirena sobre posible venta del club, de la llegada de potenciales inversores, el abonado ha empezado a sufrir más que nunca en décadas. Lejos queda el largo periodo en la máxima categoría. Pero es que incluso, quién lo iba a decir, se puede echar de menos a un Sergio Pellicer que, sin apenas fichas, condujo a buen puerto un navío candidato como pocos al descenso.

La plantilla se conjura entrenamiento tras entrenamiento a salir a flote lo antes posible. A no mirar a un fantasma que ahora marca la Real Sociedad B. Analizábamos la penúltima jornada y en ella, el filial vasco viaja a Huesca, justo cuando el Sporting (empatado a puntos con el Málaga y a dos puntos de esa línea que marca el descenso) tendrá que visitar al Fuenlabrada, ya descendido.

La última jornada depara por otra parte el largo desplazamiento malaguista hasta Lugo, ojalá que con la permanencia atada, y la Real Sociedad B recibe a un Zaragoza que como los gallegos está asentado en la mitad de la tabla.

[object Object]

¿Cómo ha visto el Málaga CF perdida su renta sobre el descenso en tan pocas jornadas? En parte por esa falta de gol que sufre desde el principio de esta temporada. Enfrente, una Real Sociedad que ha logrado seis goles en tres jornadas y que, pese a encajar una diana en cada uno de esos duelos, ha encadenado nueve puntos de nueve. Ahora está a dos de distancia de un cuadro malaguista al que le cuesta un mundo tirar al arco contrario.

No es que el Málaga CF haya tenido muchos mejores registros que el filial de la Real ante la meta contraria. Pero esa racha y la de otros equipos de la zona baja han colocado al cuadro adiestrado por Guede como el que menos goles acumula hasta la fecha en la categoría. Apenas 34 por los 40 que ahora suma el filial vasco o los 35 de Fuenlabrada y de Alcorcón.

Suscríbete para seguir leyendo