Granada CF 1-0 Málaga CF: Hundidos en la orilla

Un equipo que se juega la vida en cada minuto del partido no puede perder un encuentro en el último minuto. Nadie en realidad, pero este Málaga CF mucho menos. Lo había hecho casi todo bien, se había quedado en varias ocasiones a las puertas del gol y una pérdida de Genaro en el centro del campo en el minuto 90 fue el explosivo definitivo para que todo saltara por los aires. Ganó el Granada CF con un gol de Sergio Ruiz (1-0) después de sufrir largo y tendido.

Cada vez quedan menos partidos y son ocho puntos los que separan a los de Martiricos de la salvación. Otro error impropio de un futbolista profesional ha castigado al resto de sus compañeros después de que un Yáñez, tocado por los ángeles, salvara a los suyos por activa y por pasiva. Era el momento clave. Ganar al Zaragoza, puntuar en el Nuevo Los Cármenes y salir reforzados a por el Racing. Pero es que el castigo de este lunes es tan doloroso como inesperado después de ver al equipo durante 89 minutos.

Sorprendió el Málaga CF llevando la voz cantante en el comienzo. La incursión de Cristian como lateral izquierdo con Febas por delante da muchas cosas en ataque. Sin embargo, la primera gran ocasión de peligro llegó en el minuto 10 por parte de Callejón. Controló absolutamente solo en el área y solo un mal golpeo con la zurda impidió que fuera gol. La primera y casi había que lamentarse. Estaba todo dicho. A partir de ahí, el control rojiblanco fue absoluto. Los de Martiricos bajaron el bloque defensivo e hilvanar dos pases en el campo rival fue más que imposible. 

Ya habían superado los locales una vez las líneas y la segunda estuvo a punto de ser un auténtico drama. Solo Yáñez impidió que Uzuni marcara a bocajarro. A medio metro de la portería. Candidata a parada del año. Menos mal que ese pánico en cada acción se frenó porque el partido, de esta forma, iba a ser un suplicio. Después de la tempestad llegó la «calma» que se puede tener ante un equipo de la calidad ofensiva que tiene el Granada. Es decir, poca o ninguna, pero hubo tiempo para respirar, que no era poco.

A partir de ahí, desesperación, y «solo» en el minuto 35, por parte de todos. Pisotones, golpes, balones en largo sin sentido, protestas, tensión... Los tres puntos no solo eran vitales para el Málaga CF. Los de Paco López los necesitaban para no despegarse del ascenso directo. Así que había mucho que decir en los vestuarios para darle un vuelco al partido.

Imprecisiones

El regreso al terreno de juego reflejó a un conjunto blanquiazul voluntarioso y entregado en la lucha por la victoria. En ningún momento fue a esperar. Buscó proponer y liderar midiendo las circunstancias. Variar internadas de Febas y de Lago Junior aumentaron las pulsaciones en el Nuevo Los Cármenes. Sin embargo, el cansancio fue haciendo mella en la toma de decisiones.

El Granada le puso remedio a esos problemas pronto con la entrada de tres suplentes. Les cambió la cara a los locales, entonces con mucha más frescura. Javi Jiménez -por lesión de Cristian- y Fran Sol permitió dar otra vez varios pasos adelante. Justo los que tuvo que dar Weissman para darle al palo (79’) después de que Yáñez perdiera el balón tras cogerlo en el aire. Falló en ese momento, pero salvó a sus compañeros después de que Uzuni buscara el gol para darle un golpe al marcador. Salvador absoluto.

Pero el golpe letal estaba por venir. Conducía Genaro en el minuto 89 en el centro del campo y la perdió. Cuando miró hacia atrás vio una mitad de campo con muchos rojiblancos y muy pocos blanquiazules, que se habían volcado junto a él al ataque. Y ocurrió. Sin demasiada oposición, Sergio Ruiz remató en el área pequeña un pase atrás para dar un golpe que deja hundido a un equipo y a toda su afición (1-0).

Ocho puntos de distancia y el domingo llega el Racing. El partido más importante de la temporada. Mientras tanto, habrá que recuperarse de este hundimiento en la orilla.

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