El Málaga CF sigue sin director deportivo... 36 días después

El tiempo apremia. Sin embargo, no deben apoyar mucho esta reflexión en el Málaga CF cuando ya son 36 días los que lleva el club sin un director deportivo. No es que lleve un mes sin un utillero, un responsable de marketing o un técnico de scouting. Es que un equipo de fútbol -que además va camino de descender a Primera RFEF- lleva 36 días sin uno de sus principales trabajadores cuando ya deberían llevar meses planeando la próxima temporada.

Todo apunta, salvo milagro, a que el Málaga CF vivirá a partir del mes de junio una de las etapas más difíciles de su historia. No solo el presupuesto se verá afectado por la nueva realidad alejada del mundo profesional, deportivamente será un infierno y, por el momento, no hay nadie que le ponga rumbo al difícil futuro blanquiazul.

Manolo Gaspar, el ex director deportivo, dimitió el pasado 1 de febrero. Solo dos días después se anunció la llegada de Kike Pérez como nuevo director general. El sentido común nos haría pensar que el próximo movimiento -con cierta celeridad- debería ser el sustituto del exdirigente paleño. Sin embargo, el sentido común está desaparecido en Martiricos.

Son infinidad de temas los que tiene que tocar el próximo director de «La Cueva»: los jugadores que tendrán libertad si se consuma el descenso, la nueva plantilla con menos presupuesto, reforma del área futbolística... es decir, muchos asuntos en los que hay que trabajar desde ya y para los que está, por el momento de forma provisional, Kike Pérez.

Casi todos los jugadores de la plantilla actual cuentan con una cláusula de salida si el equipo de Martiricos desciende. Muchos de los jugadores se irán, pero a lo mejor algunos pocos se quieren quedar para devolver al Málaga CF al fútbol profesional cuanto antes. Pues con ellos habrá que negociar, casi desde ya, para firmar un nuevo salario acorde a las condiciones de Primera RFEF que se alejan mucho del que ahora cobran.

Una vez sepa la directiva quién se queda y quién se va con ficha del primer equipo, deberán atender a los canteranos. La Academia, para aligerar gastos, debería formar parte del grueso gordo de la plantilla. Con ellos también habrá que negociar. Y uno vez haya quedado todo más o menos claro, habrá que completar las piezas restantes del equipo con jugadores, esta vez sí, expertos en la categoría, conocedores de lo que es pasar por el ‘barro’.

Pues no hay un director deportivo que esté adelantando las operaciones o que esté acelerando las conversaciones. El Málaga CF espera y espera, pero el tiempo, en pleno mes de marzo, ya aprieta de cara a la próxima temporada. Son muchas las cuentas que hay que rehacer, una plantilla que reestructurar casi por completo y muy pocos movimientos los que se están dando entre los dirigentes actuales. Ahora, que es cuando la vida pende de un hilo en Martiricos, no hay nadie que reoriente el futuro ante el desastre que se avecina la próxima temporada.

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