­Las obras de regeneración y protección ambiental de las Dunas de Artola en Marbella ya están en marcha. Ayer se publicaba en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el anuncio de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar relativo a la formalización del contrato de dicho proyecto. Hoy se firma el acta de replanteo que dará lugar al comienzo oficial de las actuaciones.

El coste de los trabajos asciende a un total de 1,1 millones de euros. Por un lado se encuentran los 880.000 euros por los que la empresa adjudicataria, Assignia, realizará las obras, y por otro los 299.800 euros como justiprecio de la franja norte por donde discurrirá el paseo exterior perimetral, que se expropió en 2013. El plazo de ejecución previsto es de ocho meses.

Así pues, el Proyecto de Actuaciones en la Duna de Artola de Marbella cuenta con varias fases que pondrán en valor esta duna, considerada la principal de la provincia de Málaga.

En el marco de estos trabajos se realizará un camino peatonal que, a modo de paseo, discurrirá por la franja de servidumbre de tránsito rodeando el borde superior del sistema dunar. El objetivo de este sendero es impedir el acceso de vehículos a las dunas, a la vez que facilitar y regular el paso de los usuarios. A partir de este punto, se colocarán unas pasarelas de madera que regularán el paso peatonal hacia la playa.

Por otra parte, y aprovechando el acceso a la Torre Ladrones, el paseo perimetral continuará hasta alcanzar y rodear este elemento defensivo, declarado Bien de Interés Cultural.

Asimismo, se colocarán bancos y papeleras de madera, y se eliminarán antiguas veredas existentes en el sistema dunar.

Uno de los puntos más importantes de este proyecto es la revegetación y eliminación de especies invasoras. Aquellas áreas que presentan alta degradación y que no podrían recuperarse por si mismas al cesar la agresión, se repoblarán con vegetación dunar autóctona como el barrón, el cardo marítimo y la grama de playa.

También se plantarán alcornoques y sabinas en la zona perimetral de la duna, para densificar el cordón de vegetación que aísla este paraje del exterior.

A todas estas actuaciones hay que sumarle la labor informativa para turistas y lugareños. El proyecto contempla la colocación de diversa cartelería en caminos y pasarelas, indicando la situación de los accesos y dando a conocer los distintos aspectos ambientales, turísticos y culturales de la zona.

La finalidad principal es promover un uso público de las dunas y la playa, compatible con su óptima conservación medioambiental.

Para facilitar la visita a este enclave natural, los trabajos incluyen una zona de aparcamiento. Para ello se aprovechará el área que actualmente sirve para tal fin en el pavimento cercano a la Torre Ladrones. También se habilitarán dos nuevas áreas para aparcar los vehículos en los extremos de la zona de servidumbre de protección.

Las Dunas de Artola son testigo de lo que tiempo atrás fue gran parte de la costa malagueña. Los vientos del noroeste y las corrientes litorales aportaron incesantemente materiales arenosos hasta formar este valioso cordón dunar.