El Ayuntamiento de Marbella ha dado marcha atrás y finalmente ha decidido rescatar el Luxury Weekend, con el objetivo de no perder la marca ya impulsada. La iniciativa privada, guiada por el emprendedor Miguel Gómez Molina, ha sido determinante para propiciar que a partir de mañana se celebre una nueva edición con dos jornadas caracterizadas por un «formato más selecto» y con el «escenario privilegiado» de Puerto Banús.
El Consistorio había manifestado que la falta de apoyos privados no permitía la organización de este encuentro vinculado al lujo con la filosofía que lo había marcado hasta ahora. Ayer, el empresario Gómez Molina compareció en rueda de prensa junto al concejal de Turismo, Javier Porcuna, y al presidente del Centro de Iniciativas Turísticas (CIT), Juan José González, y expresó que nada más tener conocimiento de la situación se puso en contacto con el Ayuntamiento para relanzar la feria en un formato más reducido, «pero al mismo tiempo más potente».
Dicha estructura ha permitido que se pueda celebrar, del 3 al 4 de junio, en Benabolá (Puerto Banús). Cada una de las jornadas de este nuevo formato comenzará a partir de las 21.30 horas y se prolongará hasta la medianoche. Mañana, la marca Fred, que pertenece al grupo Louis Vuitton, presentará una campaña internacional de su colección. Será una forma de rendir tributo a Marbella como «puerta de entrada al mercado nacional».
El sábado 4 será el turno de las últimas novedades de la firma de joyas Cuervo y Sobrinos, que incluirá la participación del pianista Chucho Valdés. «El Luxury Weekend es un activo que se puede fomentar siempre que se haga de la manera adecuada. No queremos seguir la senda de la feria del millonario que se ha ido extendiendo por la accesibilidad a la misma, sino llevar la feria a las cotas que habíamos ideado en un principio», expresó.
«Este año haremos una pequeña versión de la feria y el próximo, una gran actividad sobre el paraguas del Luxury Weekend», agregó Gómez Molina.
En este sentido, Javier Porcuna, matizó: «El Consistorio consideró desde un primer momento que no era oportuno celebrarlo este año con las mismas características que en ediciones anteriores, dado el coste que suponía, y porque no estaba consiguiendo su objetivo de potenciar el sector del lujo en la ciudad».
«Se trata de un sector selecto, por lo que organizar eventos que eran masivos no eran la mejor vía para atraer a un público que tiene la sensación de ser escogido entre los ciudadanos», agregó el edil. Sin embargo, nada más publicarse que el Ayuntamiento renunciaba a su celebración, comenzaron los contactos para intentar salvarlo.
Juan José González, en nombre del empresariado marbellí, agradeció el esfuerzo para evitar la anulación del Luxury Weekend: «Me ha alegrado mucho que, a la vista de que la feria se perdiese por falta de financiación, Miguel Molina haya tomado la iniciativa de intentar hacer un Luxury para este año que salve la marca. A partir de ahora se trabajará para enfocar bien la cita del próximo año».
