El Ayuntamiento de Marbella y la empresa suministradora de electricidad Endesa firmaron ayer un convenio de colaboración para evitar cortes de luz a familias desfavorecidas del municipio a través de un sistema que bloquea los avisos por impago de las personas identificadas como vulnerables por la Delegación de Derechos Sociales.

Marbella es la única ciudad que ha conseguido un acuerdo de estas características al margen de las capitales de provincia, en Andalucía.

El convenio fue suscrito ayer en el Ayuntamiento por el alcalde, José Bernal, y el director general de Endesa en Andalucía y Extremadura, Francisco Arteaga, quien señaló que el acuerdo pretende «ayudar y sufragar las deudas económicas generadas por impagos» de usuarios con pobreza energética.

En este sentido, Arteaga destacó el compromiso de ambas instituciones para «agilizar y facilitar el pago de las facturas de aquellos usuarios que se encuentren en situación de extrema vulnerabilidad» a través del estudio de casos y ayudas sociales.

Además, Endesa facilitará a los técnicos municipales «la forma de pago de las ayudas que se adopten para evitar el corte del suministro» sin la aplicación de intereses o comisiones.

El director territorial de Endesa aseguró que desde septiembre se ha puesto en funcionamiento un sistema a través del cual se bloquean los cortes a personas con pobreza energética. El procedimiento se basa en el trabajo que han de realizar los trabajadores sociales de la Delegación de Derechos Sociales de identificar «a las familias que están pasando una situación especialmente difícil y de vulnerabilidad económica» y notificarlo a la compañía, que recibe «una identificación como suministro singular al que se le dará un tratamiento distinto al general».

Con ello, en la base de datos de Endesa «se bloquea el proceso que se activaría normalmente en caso de impago», que conllevaría al corte y posterior reconexión y «se reconduce a los servicios del Ayuntamiento para analizar la situación» y comprobar que esa familia está acogida a la protección de los Servicios Sociales para evitar el corte.

Entre las ventajas, Arteaga destacó evitar la angustia del reenganche sin suministro o los costes de este proceso. Asimismo, apuntó que mientras evoluciona la situación de la familia «la empresa soporta un aplazamiento del pago».

Por otro lado, el directivo señaló que la eléctrica presta a las familias «formación en el uso racional y eficiente de la energía», fomenta el cambio de equipamientos de iluminación eficiente y asesora sobre el bono social, cuya definición revisa en estos momentos el Gobierno central.

Por su parte, el alcalde destacó que el convenio se suscribe con el objetivo de «dar la mayor cobertura posible a aquellos que peor lo están pasando» y aludió a la responsabilidad social que han de tener todas las administraciones e instituciones, que deben «buscar puntos de acuerdo y sinergias para que la sociedad, y sobre todo aquellos más débiles, tengan el mínimo perjuicio posible».