Las obras para solventar los problemas históricos del embovedado de Río Huelo y mejorar la red de saneamiento en la calle Huerta Chica han entrado en su recta final y, según las previsiones, estarán concluidas a finales del mes de marzo.

El alcalde, José Bernal, acompañado de la edil de Obras, Blanca Fernández, visitó los trabajos y señaló que las obras «están muy avanzada y se están cumpliendo los plazos establecidos».

«Con esta obra vamos a dar respuesta a una necesidad urgente de garantizar la estabilidad de las viviendas y de los comercios de la zona, ya que el antiguo encauzamiento del río podía crear graves problemas en las construcciones», manifestó José Bernal.

El regidor añadió: «Nos metemos en las tripas de la ciudad y mejoramos algo esencial como las canalizaciones de aguas pluviales como fecales», afirmó, al tiempo que recordó que se contempla asimismo una intervención en superficie «para mejorar la convivencia entre peatones y vehículos».

Por su parte, Blanca Fernández indicó que fueron los vecinos «los que alertaron del riesgo que podrían estar corriendo las viviendas y los técnicos pudieron comprobar posteriormente que en parte de la calle el río pasaba directamente por debajo de los inmuebles con un peligro inminente de hundimiento».

La actuación, que tiene un presupuesto de 1,1 millones y se está ejecutando con cargo al fondo de obras de alcantarillado de la empresa concesionaria Hidralia, se centra ahora en la finalización de las infraestructuras y en terminar el nudo de la nueva red con las canalizaciones de la avenida Ricardo Soriano.

«Los trabajos van a buen ritmo y sólo se vieron afectados por el temporal del pasado diciembre y algunas precipitaciones posteriores», indicó la edil, quien señaló que también se mejorará la red de saneamiento y se acometerán nuevas infraestructuras de telecomunicaciones, gas o electricidad.

En superficie, la concejala señaló que se mantendrá la estética en consonancia con el resto del casco antiguo y destacó que se habilitará una plataforma única con acera y calzadas a la misma altura «para mejorar la movilidad y la accesibilidad de los peatones». El gerente de Hidralia, Carlos Corral, insistió en que la obra acabará en marzo. «Haremos todos los esfuerzos, ampliando la jornada o trabajando sábados porque es fundamental cumplir el plazo por el bien de vecinos y comerciantes».