El Ayuntamiento de Marbella instaló ayer un control de gálibo en la entrada del túnel de El Fuerte, una medida con la que pretende evitar incidentes que dañen de nuevo la estructura tras el accidente ocurrido el pasado mes de junio, cuando una furgoneta impacto en una de las vigas, lo que generó una intervención para su reparación que duró varios días, con las consecuentes molestias al tráfico, según recordó ayer la concejala de Obras, Blanca Fernández.