Las obras para instalar los espigones en el litoral de San Pedro comenzarán entre finales de 2018 y principios de 2019 si el proyecto «sigue al ritmo en el que está», según señaló ayer el concejal de Playas, Manuel Cardeña.

La iniciativa se encuentra en la fase de recepción de propuestas para redactar el proyecto, indicó el concejal. Cardeña confía en que la redacción del proyecto se adjudique en noviembre y la propuesta se elabore «en los primeros meses de 2018». La adjudicación de la obra se sacará entonces a concurso público.

El proyecto para construir los espigones en las playas de Marbella está pendiente de una calificación ambiental, cuyo trámite de exposición pública es de ocho meses de duración, aunque el Ayuntamiento está pendiente de mantener una reunión con el Ministerio de Medio Ambiente para agilizar el procedimiento. Cardeña espera que la cita se concrete en octubre. «Desde el Ministerio nos dicen que están abiertos a cualquier sugerencia y que la argumentemos bien técnicamente. Estamos en un punto técnico. Tenemos que apoyar ese procedimiento técnico para tratar de llevar el ascua a nuestra sardina», agregó.

El objetivo del equipo de gobierno es que el proyecto de los diques en Marbella se «iguale» en plazos al de San Pedro, algo difícil por el requisito que el Gobierno central ha impuesto, señaló el concejal en alusión al informe ambiental y el periodo de tiempo que requiere.

«Vamos a ver si existe algún procedimiento abreviado. Las playas de Marbella necesitan una solución urgente», agregó el concejal. La Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol planifica el retranqueo de los colectores de las playas del casco urbano de Marbella, según el edil. «De nada serviría regenerar las playas y poner espigones si no está previsto el retranqueo de los colectores. Tenemos que ir de la mano con la regeneración del litoral de Marbella», apuntó el edil.

El Gobierno central sopesará que los espigones sean transitables, como solicita una plataforma ciudadana.