La Asociación de Comerciantes y Profesionales del Casco Antiguo de Marbella (Acoprocamar) está a favor de que las plantas altas de los edificios de la zona se dediquen a uso residencial pero no al hostelero.

Los comerciantes aceptan dejar de utilizar las plantas altas como almacenes de sus locales -lo que hacen para ganar espacio en los locales- si el uso que reciben estas plantas es residencial, ya que de esta forma, señalan, se garantiza el interés general.

Sin embargo, un cambio en la modificación de las normas urbanísticas, que PP, PSOE y OSP aprobaron hace una semana, abre la puerta a que las plantas altas tengan uso hostelero.

La asociación entiende que la modificación supone una «discriminación flagrante» para los pequeños comerciantes del Casco Antiguo.

Acoprocamar critica también que los comerciantes de la zona estén obligados a incorporar un aseo adaptado en sus negocios, a pesar de que la medida no figura en la normativa sectorial.

«Tendremos que incorporar el almacén y el aseo adaptado, frente a la hostelería, que puede ocupar la planta alta, o al pequeño comerciante de grandes superficies, que no necesita el aseo adaptado», explica la presidenta del colectivo, Carola Herrero.