La empresa que organiza los conciertos musicales de Starlite «no confirma» que la edición del próximo verano se organizará en la Cantera de Nagüeles, en la que se celebra desde su creación en 2012, o que se vaya a celebrar en Marbella. «Puede ser la Costa del Sol, Marbella o alrededores. No lo puedo confirmar al cien por cien», señalaron ayer a La Opinión de Málaga fuentes de la agencia que gestiona la comunicación del evento.

Que el emplazamiento vuelva a ser la Cantera de Nagüeles «es un dato que, en estos momentos, todavía no estamos en disposición de confirmar», señalaron.

Preguntados si Marbella albergará el Starlite del próximo verano, las fuentes señalaron que «en principio sí, pero no puedo confirmar nada».

Las fuentes señalaron que se está negociando el emplazamiento y confiaron en que pronto se conozca. «Obviamente es la Costa del Sol y seguramente sea Marbella, pero aún no lo podemos confirmar», señalaron las fuentes, que reiteraron que «no hay confirmación del emplazamiento del evento».

Ante la imposibilidad de confirmar si Marbella o la Cantera de Nagüeles albergarán la próxima edición del festival musical, que será la séptima, la agencia de comunicación se centra en anunciar los artistas que actuarán y en la venta de entradas. Entre los que han confirmado su asistencia destacan Sting, que cantará el 19 de julio, Pablo Alborán, que lo hará el 1 de agosto, o David Bisbal, cuyo concierto está previsto para el 20 de julio.

Las tensiones entre la organizadora del evento y el Ayuntamiento de Marbella comenzaron durante la celebración de la pasada edición, cuando al frente del Consistorio se encontraba el anterior equipo de gobierno.

Los motivos del enfrentamiento entre ambas partes se debieron, entre otros motivos, a los horarios de cierre de la zona lounge, en la que no se celebran los conciertos, y el canon que debía pagar la organizadora por explotar la Cantera de Nagüeles, un recinto forestal que pertenece a la Junta de Andalucía. El anterior equipo de gobierno impuso a Starlite un canon de 121.000 euros, 17 veces más alto que el de 7.000 euros que abonó por las ediciones de los cinco primeros años. La pasada edición se celebró tras una prórroga que pactaron Ayuntamiento y organización después de que el convenio venciera.

La polémica supuso que ayuntamientos de municipios próximos a Marbella se ofrecieran para acoger el festival. Tras el cambio de alcalde en Marbella, el equipo de gobierno trató de declarar a Starlite como «festival de interés municipal» para convencer a la organización de que permanezca en el municipio. Pero el emplazamiento de la próxima edición aún no está cerrado.