Unas 700 familias de alumnos de los colegios Vicente Aleixandre, Juan Ramón Jiménez y Rafael Mayoralas aseguran sentirse «engañadas» por el Ayuntamiento de Marbella tras conocer que inició a finales de marzo la licitación para eliminar el servicio de comedor con personal de cocina en los tres centros y sustituirlo por el servicio de catering. «Nos sentimos engañados porque ni en el pleno municipal del 28 de marzo ni en una reunión que mantuvimos con la alcaldesa (Ángeles Muñoz) el 2 de abril, ni en otra cita con la delegación municipal el 13 de abril ni en la asamblea de familias del 19 de abril se nos trasladó a las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos esa información», señala la portavoz de las asambleas de padres, Alba Foronda.

Las familias han pedido al gobierno local que tenga «voluntad política» para retirar la licitación ya que «nos gobiernan los cargos públicos que hemos elegido y no el Interventor municipal» y han emplazado al Ayuntamiento a que manifieste que garantizará que los tres únicos colegios de Marbella con servicio de comedor con cocineros conservarán la prestación.

Los padres instan al equipo de gobierno a que pare el proceso de licitación del servicio de comedor «de manera urgente e inmediata» y solicite a la Junta de Andalucía los informes de no duplicidad y no competencia impropia que permitan al Ayuntamiento revocar el reparo del Interventor municipal.

La delegada de Educación de la Junta en Málaga, Patricia Alba, y el jefe de Planificación, Marcelo Gaitán, mostraron su disposición a redactar los escritos en una reunión de mediados de abril, según los padres de los alumnos.

«Queremos que este modelo de cocinas con personal municipal se mantenga porque es garantía de calidad en el servicio, garantía de calidad en el producto y revierte en el comercio local de Marbella con cerca de 500.000 euros al año en los tres colegios», indicó la portavoz.

Unos 800 alumnos de los tres colegios se benefician del servicio de comedor de cocina, cuyo personal depende del Ayuntamiento.