La Junta de Andalucía garantiza que el colegio Juan Ramón Jiménez mantendrá el servicio de comedor a partir del próximo curso académico.

El Gobierno regional es partidario de que el Ayuntamiento siga ofreciendo el servicio, como desde hace unos 20 años -desde que se inauguró-, y en el supuesto de que el Consistorio «se manifieste incapaz» de proporcionarlo, garantizaría su prestación, según afirmaron ayer fuentes de la Delegación de Educación de la Junta a La Opinión de Málaga.

Educación afirma que comunicó en una reunión con la directora general de Cultura y Enseñanza del Ayuntamiento, Carmen Díaz, y otros concejales, que «no existe inconveniente» por parte de la Junta para que el Consistorio continúe prestando el servicio de comedor.

En la cita, los representantes de la Delegación Provincial de Educación notificaron a Díaz que el ente regional remitiría la documentación adicional que el Ayuntamiento necesitara para salvar el reparo del interventor municipal, contrario a que el Consistorio asuma la prestación debido a las restricciones contempladas en la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, lo cual le impiden sustituir al personal vacante o realizar nuevas contrataciones.

«Hasta el momento, sin embargo, no se ha producido ninguna petición oficial al respecto», añade la Delegación de Educación.

IU, cuyos concejales acudieron a la reunión, señalan que el documento que el Ayuntamiento debe solicitar a la Junta para evitar las objeciones del habilitado nacional es el informe de compatibilidad y de no duplicidad.

Sin embargo, en una carta dirigida a la delegada territorial de Educación, Patricia Alba, el 23 de enero de 2017 -a la que ha tenido acceso este diario- la alcaldesa, Ángeles Muñoz, pide que la cocina del colegio Juan Ramón Jiménez pase a depender de la Consejería a partir de este curso. «No pedíamos un servicio de catering, como se está diciendo», señaló la directora general de Cultura y Enseñanza del Ayuntamiento.

Según Díaz, en una carta fechada el 4 de mayo, la alcaldesa pidió a la Delegación de Educación que comunicara al Ayuntamiento qué medidas tenía que seguir para iniciar el procedimiento para la firma de un convenio de colaboración entre ambas administraciones públicas para garantizar el servicio de comedor con cocina en el colegio. El gobierno local, señaló Díaz, está a la espera de que el servicio jurídico de la Junta le traslade qué medidas tiene que adoptar para ofrecer el servicio de comedor. «No hay ningún engaño por parte de la alcaldesa, ni del Ayuntamiento. Estamos en el mismo deseo, en la continuidad de esos comedores. Pero necesitamos que nos den la fórmula para firmar el convenio», agregó.

Según Díaz, si ambas administraciones públicas firman el convenio antes del inicio del curso escolar, el Ayuntamiento asumirá la gestión del servicio de comedor y, si no es así, será la Junta de Andalucía la que lo asuma.

«La Junta nos ha comunicado que habrá garantías de que se mantendrá un servicio de comedor con cocineros», señaló la directora general.

Aunque la situación es más acuciante en el Juan Ramón Jiménez, padres de alumnos de los colegios Vicente Aleixandre y Rafael Fernández Mayoralas se manifestaron hace una semana para reivindicar el servicio de comedor en los tres centros. Aseguran que la prestación es una garantía de calidad en el servicio y en los productos con los que se elabora la comida y que inyecta a la economía local unos 500.000 euros al año.