Marbella contará a partir de otoño con dos paradas para coches tirados por caballos, uno de los medios de transporte más utilizados por los turistas para visitar la ciudad. Uno de los estacionamientos estará ubicado en un tramo de la avenida Ricardo Soriano, la principal artería de comunicación del municipio, próximo al Parque de la Alameda y a poca distancia de la parada que utilizan los caballistas en la actualidad. El otro estacionamiento se ubicará en la avenida España, junto al Parque de La Constitución y próxima a la Oficina de Turismo del Paseo Marítimo, según el concejal de Transporte, Félix Romero.
La parada de la avenida Ricardo Soriano «será transitoria», señala el concejal, por lo que sólo podrán estacionar dos coches de caballos de forma simultánea y durante un tiempo inferior a los 20 minutos. La parada contará con parasoles con los que crear zonas de sombra para los equinos, toma de agua y conexión a la red de pluviales para el saneamiento. El inicio de las obras para acondicionar el tramo de la avenida Ricardo Soriano, que actualmente es una jardinera, está previsto para septiembre. «Se trata de una obra muy fácil. La acera en esa parte de la avenida tiene espacio suficiente para albergar la parada», señala el concejal.
Durante el verano, los coches de caballos estacionarán en la confluencia entre la avenida Ricardo Soriano y la calle Miguel Cano, la opción «más lógica», según Romero. «Es una zona con gran visibilidad en la que la Policía Local puede controlar los coches de caballo e impedir que haya más de dos vehículos y controlar las condiciones en las que están los equinos o que los titulares de los coches de caballos realicen vertidos que no deben hacer», explica.
El anuncio de la construcción de ambas paradas se produce después de que el grupo municipal instara al gobierno local a que reubique la zona de estacionamiento de los coches de caballos en un emplazamiento que reúna las condiciones de sombra y salubridad para los animales y de seguridad para los pasajeros de este tipo de transporte y del resto de vehículos que transitan por la calle Miguel Cano, que cuenta con una parada de autobús y de taxis.
«Hace falta habilitar una parada en la que los caballos no pasen este verano bajo el yugo del sol durante las horas de mayor inclemencia del sol. Mientras el gobierno del PP dice buscar soluciones, la realidad es que los equinos estarán un verano más al sol», señala el concejal de IU, Miguel Díaz, exresponsable de Movilidad.
El anterior equipo de gobierno prohibió que los coches de caballos prestaran servicio entre las 15.00 y las 18.00 horas en verano y reubicó la parada de la calle Miguel Cano en una vía próxima que contaba con zonas de sombra.
