Los jardines del Real Club de Golf Guadalmina acogen la que será la trigésimo quinta edición de la Cena de Gala de Marbella, cuyos beneficios se destinarán íntegramente a la puesta en marcha de un Centro de Día para pacientes oncológicos y sus familiares en el local cedido por el Ayuntamiento de Marbella a la AECC. Entre los asistentes figuran el expresidente del Gobierno José María Aznar, la princesa Beatriz de Orleans, la actriz Inés Sastre, el extenista Manolo Santana, y otras personalidades como Ágatha Ruiz de la Prada, Jaime Ostos, y, conduciendo la gala, Boris Izaguirre, Paloma Lago y Vicky Martín Berrocal.

Durante el transcurso de la cena, tiene lugar la tradicional rifa benéfica, que este año adquiere un protagonismo especial al contar con regalos de gran valor sentimental, como una raqueta utilizada por Manolo Santana en Wimblendon, una corbata de Arturo Fernández, o dos entradas para ver a Plácido Domingo en el Metropólitan de Nueva York.

En esta edición, las actuaciones estarán a cargo de Jorge Hernán Baena y el Mariachi Internacional de México, junto con la participación estelar de Pitingo, que presentará el espectáculo "Mestizo y Fronterizo". Cerrará la fiesta el DJ internacional Ignace Showcolat.

Maika Pérez de Cobas, presidenta de la Junta Local de AECC Marbella, ha destacado la importancia añadida que tiene la XXXV Gala de Marbella: "Todas las ediciones son importantes, pero el objetivo de este año, inaugurar un Centro de Día para pacientes oncológicos en Marbella, nos hace trabajar con especial ilusión".

Por su parte, Ignacio del Cuvillo, vicepresidente de AECC Marbella y gerente del Club de Golf Guadalmina, fue el encargado de presentar el balance de las cuentas de la gala 2017. Después de contabilizar ingresos (263.690,40€) y gastos (90.076,58€), la edición del año pasado arroja un balance positivo de 173.613,82€.

En cuanto al Centro de Día, la Asociación Española Contra el Cáncer quiere ampliar servicios en Marbella a corto plazo, por lo que va a inaugurar dicho centro para atender de forma gratuita a pacientes y familiares. El objetivo es proporcionar a los enfermos un espacio, fuera del ambiente hospitalario, donde compartir experiencias, relacionarse con otras personas que han superado un cáncer, proporcionarles un asesoramiento psicológico y médico, etc. Para ello ya se están preparando diferentes talleres de ejercicio físico, meditación, memoria e incluso de cocina, si fuera posible.