El Día de Andalucía fue ayer el elegido para condecorar con la Medalla de Oro de la Ciudad a dos vecinos ilustres del municipio de Marbella. Este año el juez José Godino junto a Francisco Moyano recibieron delante de familia, amigos y seres queridos el reconocimiento de la ciudad por la gran labor que han desempeñado en ella y en favor de los vecinos de la localidad a lo largo de sus respectivas carreras.
El primer galardonado fue Francisco Moyano, persona muy conocida en el municipio. Es historiador, periodista, docente, experto en cofradías y escritor. A lo largo de su vida ha desempeñado varios trabajos y colaboraciones en medios de comunicación como Radio Nacional de España, COPE o RTV Marbella.
Fue durante 12 años director del colegio Monseñor Rodrigo Bocanegra, para después pasar por el IES Sierra Blanca, donde trabaja actualmente. Sin duda, es un rostro de la cultura local reconocido por todos los marbelleros.
Sus compañeros destacan de su figura las ganas de aprender constantemente desde joven y su imparable vitalidad e ímpetu en todo lo que hace. Además, ha sido el encargado de pronunciar pregones para diferentes cofradías y hermandades de la localidad a lo largo de los años.
Este reconocimiento se le ha concedido por unanimidad entre los grupos políticos del municipio. Fue entregado por la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz y el portavoz del PSOE en Marbella, José Bernal, quien propuso a Moyano el pasado verano como acreedor a este galardón.
Como parte del homenaje, se proyectó un video que recoge toda su vida, desde su infancia hasta la actualidad, intercalado por testimonios de amigos y compañeros que no han dudado en compartir con los presentes el cariño y las buenas palabras hacía Paco Moyano. «Esta medalla siempre irá contigo, y sé que siempre la llevarás en el corazón», manifestó la alcaldesa marbellí.
En su discurso, no quiso perder la oportunidad de rendir tributo al poeta Antonio Machado, en el mes del aniversario de su muerte. «No me queda otra que aceptar la medalla con orgullo y responsabilidad», dijo.
El otro protagonista del día fue José Godino, juez y, desde 2007, presidente de la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Málaga. Su compromiso desde los juzgados por recuperar el dinero y los bienes del caso Malaya a la ciudad ha sido motivo principal para concederle la Medalla de la Ciudad.
En esta ocasión, fue el portavoz del Ayuntamiento y concejal de Fiestas, Félix Romero, quien ha acompañado a la alcaldesa a obsequiar a Godino.
Esta conmemoración se suma a la medalla de oro del concedida por el Colegio de Abogados de Melilla y de los colegios de Procuradores y Graduados Sociales de Málaga, además de la medalla de la Orden de San Raimundo de Peñafort.
El juez lleva 15 años residiendo en Marbella junto a su mujer María José quien, afirmó, ha sido un pilar fundamental en su vida y en sus decisiones.
El pasado junio fue el encargado de entregar un cheque por el importe de 12 millones de euros procedentes de la venta de algunos de los bienes incautados de la macrocausa. «Eres una de las personas importantes de la ciudad de Marbella. Has sabido interpretar lo que los vecinos pediamos en la calle y precisamente por eso, a partir de ahora, tu figura y la del nombre del Marbella será trascendental», afirmó la alcaldesa, quien presentó a pleno la candidatura de Godino para la Medalla de Oro el pasado año.
«Tengo el compromiso de desempeñar mi trabajo y el deseo de que esta ciudad siga recobrando la tranquilidad y el buen nombre que se merece», con esa promesa, Godino ha explicado que va a seguir trabajando para cerrar un capítulo negro que tanto daño ha hecho a la ciudad.
«Es un privilegio vivir en una ciudad que es como mi casa», afirmó, agradeciendo también el ser reconocido y valorado.
La alcaldesa no quiso desaprovechar la oportunidad de agradecer de nuevo la labor de ambos. «La ciudad quiere daros las gracias por hacer más grande nuestra Marbella».
Durante el acto, fue palpable la magia del municipio y el cariño y orgullo de Godino y Moyano hacia la ciudad de Marbella, de la que el juez afirmó que desprende «hospitalidad» e «idiosincrasia».
Fue un Día de Andalucía especial para ambos, quienes recordarán esta jornada como una de las más importantes y emotivas de sus carreras. Tras años dedicados a la lucha por convertir en Marbella en un lugar cálido para sus habitantes.
