La Junta de Andalucía ha pedido al equipo de Gobierno, del PP, más información sobre el plan económico y financiero con el que confía recuperar el equilibrio presupuestario después de que el Ejecutivo local formado por PP y OSP excediese en 55 millones de euros el límite de gasto en las cuentas municipales de 2018.

Aquel año, el Ayuntamiento gastó 238 millones de los 245 que recogían los presupuestos municipales a pesar de que el límite de gasto estaba en 183 millones, según el Interventor municipal.

En concreto, el Gobierno regional ha emplazado al Ejecutivo local a que precise diferentes aspectos del plan de ajuste que PP, OSP y Podemos -entonces con representación municipal- aprobó en un pleno extraordinario en abril.

El portavoz municipal y delegado de Hacienda, Félix Romero, niega que la Corporación municipal haya gastado dinero que no tuviese o que esté en riesgo la estabilidad de los servicios que presta el Ayuntamiento. «Lo que hemos hecho ha sido gastar dinero que teníamos, pero más dinero del que el Gobierno central nos permitía gastar porque optamos por garantizar los servicios a los vecinos antes que cumplir con los objetivos de contabilidad nacional», explica.

Asegura que el Ayuntamiento acreditó ante el Ministerio de Hacienda que el exceso de gasto no afectaba a la viabilidad del Ayuntamiento «porque el incumplimiento se debió a una situación coyuntural, una baja ejecución presupuestaria en años anteriores, y no estructural. La Junta nos ha pedido un mayor nivel de detalle, pero las propuestas son las mismas que las aprobadas en abril», agrega. Según Romero, el Ayuntamiento mantendrá el nivel de ingresos sin aumentar los impuestos y evitará los recortes «que afecten a servicios o personas».

El concejal socialista José Ignacio Macías asegura que el plan que ha elevado el Gobierno local a la Junta carece de medidas concretas para paliar el exceso de gasto, no están fundamentadas ni cuantificadas, ni cuentan con un calendario de ejecución. «Se dice que se reducirán sedes administrativas para contener el gasto municipal. Pero ¿cuáles se van a reducir? ¿en qué momento? ¿cómo se hará? Y sobre todo ¿cuánto espera el Ayuntamiento ahorrar con esta medida? Se habla también de potenciar la Administración electrónica, pero ¿qué se hará y cuánto se ahorra?», pregunta.

El plan recoge también ingresos con cargo al futuro PGOU cuya redacción tendrá que volver a licitar el Gobierno local por defectos de forma en la adjudicación anterior.

El interés de la Junta sobre los detalles del plan de ajuste «tiene que preocupar a trabajadores municipales, vecinos o contratistas del Ayuntamiento», señala el edil.