A Dani García el confinamiento no sólo le ha servido para dar clases de cocina en redes sociales, sino para desarrollar nuevos conceptos y proyectos. Por lo pronto, además de reabrir Lobito de Mar y Bibo en Marbella (Málaga) y Madrid, el 18 de junio inaugura Leña y a finales de año desembarca en Nueva York.

"Ningún proyecto se me ha caído, es más, nos han ido saliendo", dice el cocinero marbellí, quien cerró el pasado noviembre el tres estrellas Michelin que tenía en su ciudad, espacio remodelado para Leña, para emprender una nueva trayectoria profesional con la ilusión de "dar de comer a miles en vez de a cientos" dentro y fuera de España.

A lo largo de junio vuelven Lobito Marbella (día 11) y Madrid (12), y BiBo Marbella (18) y Madrid (22), pero con especial ilusión anuncia la inauguración de Leña, 'steak house' "como no existe en España", centrado en las brasas y carnes, que retrasó la pandemia.

"En España hay asadores de toda la vida, pero Leña te transporta hacia otro universo. Tendremos ahumados americanos, yakitoris (brochetas) como las de Tokio, kebabs y shawarmas de verdad, empanadas indias de 'butter chiken', hamburguesas picadas ante el comensal, pollos y patos asados, cortes a la parrilla... Es un recorrido por los platos de carne que más me gustan del mundo, sin caricaturas", explica.

García, que ha perdido peso durante el confinamiento gracias a "una vida más ordenada", es "optimista" sobre la respuesta de los comensales en la nueva normalidad: "Veo a los clientes con muchas ganas. Hemos abierto reservas y ha sido una pasada. Puede que no sea un verano normal, pero creo que no será malo del todo".

Además, el Grupo Dani García continúa su expansión internacional, ya que a finales de año abrirá por partida doble en Nueva York, donde ya estuvo con el restaurante Manzanilla varios años. "Vuelvo con muchas ganas y sin ningún miedo, con proyectos muy nuestros y eso me hace muy feliz, porque quería volver a la ciudad, pero siendo auténticos, y la primera vez no me dejaron".

Total libertad le ha dado su nuevo socio, Sam Nazarian y su Creating Culinary Communities (C3) para desarrollar Casa Dani, "lo mejor de Lobito de Mar y BiBo, con toques más mediterráneos, con espetos, arroces, ibéricos y atún", y Minük, cuya carta se centrará en "ensaladas de diferentes países del Mediterráneo y pollos asados".

Son solo los primeros pasos de una alianza que nace con el objetivo de abrir otros 15 Casa Dani y hasta 100 Minük en el mundo en los próximos cinco años. "Ellos te abren la mente empresarialmente; nosotros le aportamos una gastronomía mediterránea con chispa", apunta.

Por el momento, Grupo Dani García tiene siete restaurantes abiertos en España y Oriente Medio, pero "se va a multiplicar mucho en los próximos dos o tres años; nos gusta crear conceptos diferentes, mejorando lo que hay en cada segmento, ya sea de ticket medio de 50 euros o de 20; y lo importante es que todo sale de nuestro I+D de Marbella".

Por eso ha retomado un proyecto que tuvo que aparcar hace dos años, "otra fórmula de restaurante que probablemente verá la luz este otoño".

Además de Leña, la pandemia ha retrasado la inauguración de su restaurante en el hotel Four Seasons de Madrid, cadena para la que ha creado en exclusiva la marca Dani's. "Estaba previsto en mayo, pero probablemente será en septiembre; es una pena", admite.

También le costará más arrancar su división de catering y eventos. "Tenemos menos claro cuándo será el pistoletazo de salida. Para casarse con un aforo limitado, los novios prefieren esperar".

Siente que tiene "fuerza, las cosas claras y fuerza para el futuro", aunque, como hostelero, le hubiera gustado más apoyo del Gobierno al sector con medidas como la supresión del Impuesto de Sociedades a hoteles y restaurantes aprobada por Portugal.

"Los ERTE y los ICOS son buenas medidas, pero insuficientes. Pueden desaparecer muchos negocios relativamente rentables y lo harán los que no hayan hecho sus deberes de gestión antes de la Covid-19. Los malos momentos son difíciles de gestionar pero son gestionables", afirma.