La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento crearán una mesa técnica bilateral para el seguimiento de la elaboración del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que sustituirá al de 1986, en vigor desde que el Tribunal Supremo anulara el planeamiento de 2010, a finales de 2015.

La comisión de coordinación estará integrada por representantes de la Administración autonómica y municipal y a ella podrán incorporarse representantes de las administraciones sectoriales, ya sea de la Junta de Andalucía o del Gobierno central, cuyos intereses puedan verse involucrados en el PGOU, según anunció ayer la consejera de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, Marifrán Carazo, que mantuvo una reunión con la alcaldesa, Ángeles Muñoz.

«Esta mesa técnica de coordinación se entiende como una herramienta clave para promover la colaboración entre administraciones desde el principio del proceso. La colaboración institucional y el entendimiento son el camino más rápido para sacar adelante proyectos necesarios para reactivar la economía y generar empleo», agregó.

Carazo consideró «primordial tender puentes y vías de diálogo» con los ayuntamientos para facilitar la tramitación de sus planes urbanísticos, que, en opinión de la consejera andaluza, «en los últimos años se han visto sometidos a una maraña de normativas que ha lastrado el desarrollo de sus territorios».

Según la alcaldesa, Ángeles Muñoz, la comisión bilateral permitirá al Gobierno regional «estar presente durante todo el procedimiento y trabajar desde el inicio en un documento conjunto, yendo de la mano en todos los informes sectoriales y de todo aquello que la Junta requiera al Ayuntamiento. Se trata de que la Administración autonómica tenga absoluto conocimiento desde el minuto uno de todos los trámites, antes de la aprobación definitiva del Plan, con lo que ganamos un tiempo absolutamente necesario».

El anuncio de la creación de la comisión bilateral se produce semanas después de que la Corporación municipal aprobara por unanimidad en pleno el avance del PGOU, el documento que marca el inicio de la elaboración del planeamiento con el que el Ayuntamiento pretende devolver la estabilidad al urbanismo del municipio.

El objetivo del equipo de gobierno es aprobar de forma inicial el PGOU en el primer semestre del próximo año; de forma provisional en 2022; y de manera definitiva, antes de que finalice el mandato.

El equipo multidisciplinar que contrató el gobierno local para redactar el PGOU ya cuenta con el informe de impacto medioambiental del planeamiento. El Ejecutivo local lo abordará con los grupos de la oposición en las últimas semanas de agosto y lo presentará en pleno en septiembre para después remitírselo a la Junta.