Las ferias de arte y de diseño que Marbella alberga en el Palacio de Ferias y Congresos Adolfo Suárez desde hace seis y tres años respectivamente se celebran este año de forma conjunta ante las adversidades ocasionadas por la pandemia del coronavirus para organizar actos de gran afluencia de público.

La irrupción del virus ha obligado a modificar calendarios; reducir el espacio de las dos ferias, que se clausuran el sábado; y obstaculizado la presencia de firmas internacionales, pero también ha facilitado que, por primera vez en el municipio, Marbella Design y Art Marbella «se den la mano y establezcan un diálogo», señala el CEO de Marbella Design, Alejandro Zaia.

«La tercera edición (de la feria de diseño) se lleva cabo gracias a un esfuerzo especial en unas circunstancias especiales. No ha sido fácil estar aquí», agrega Zaia, que destaca que el diseño de Marbella Design, inspirado la década dorada de los años 60 en el municipio, es «un canto al optimismo en unas circunstancias tan difíciles como las que atravesamos y un mensaje de que los buenos tiempos y la normalidad volverán».

Marbella Design cuenta con la presencia de cerca de 20 firmas de interiorismo y unas 200 marcas de diseño y, en la edición de este año, tiene especial relevancia el interiorismo de yates.

También tiene un peso especial la artesanía y la producción local, ámbito en el que destacan la presencia de Fernando Moreno, una de las empresas con mayor implantación en la Costa del Sol y con más de 50 años de experiencia en los sectores de la construcción y del diseño; Calligaris, dedicado al diseño y distribución de mobiliario contemporáneo; y Maderas Santaella, especializado en la producción de maderas nobles de alta calidad que muestran su trabajo en dos espacios diferentes dentro de la exposición.

Por su parte, en Art Marbella destaca este año la fuerte presencia de galerías locales. Entre ellas figura Reiners Contemporary Art, que cuenta con una instalación audiovisual en la que la artista Sali Muller «involucra al visitante tratando de exponer lo invisible a través de la vista y hacerle reflexionar, pensar, sobre la posibilidad de ver las cosas de otra manera», indican fuentes de la organización del espacio de arte.

El espacio de la feria dedicado al arte muestra dos esculturas inéditas de Matias di Carlo que, expuestas en la entrada del Palacio de Ferias y Congresos, dan la bienvenida a los visitantes; y el proyecto fotográfico 'Baroque', del profesional autodidacta centrado en la fotografía documental Pío Cabanillas.

Con esta muestra en la que el protagonista es el Cañón Antelope, en EEUU, Cabanillas «rinde homenaje a la imagen libre en la que se nos ofrece una realidad inabarcable, llena de alternativas y una versátil ficción al servicio de la fantasía de los que quieran captar su esencia», señalan las fuentes.