Comerciantes de Marbella, en su mayoría con establecimientos ubicados en el Casco Antiguo y el centro urbano, volvieron ayer a salir a la calle para exigir al equipo de gobierno ayudas directas con las que hacer frente a la crisis económica generada por el coronavirus.

La Plataforma de Comerciantes y Hosteleros de Marbella, que aúna a cerca de 250 empresarios y que a finales de octubre promovió una concentración ante el Ayuntamiento, organizó una caravana en la que participaron cerca de 50 vehículos y que partió desde el bulevar Pablo Ráez, transcurrió por la avenida Ricardo Soriano, llegó a Puerto Banús y regreso al Arco de Marbella, donde finalizó.

Los vehículos que participaron, en su mayor parte coches aunque también salieron furgonetas y motocicletas, portaron cruces funerarias confeccionadas en las carrocerías con cinta aislante y carteles con los mensajes «RIP Comercio local» o «Marbella. Se Alquila» e hicieron sonar los cláxones durante el trayecto.

Agentes de la Policía Local y Nacional escoltaron a la caravana en la que iba Isabel Reifenraph, que regenta en el Casco Antiguo un establecimiento que abrió en el verano de 2019 y que, de no recibir apoyo económico, teme cerrarlo en enero. «No viene el turismo y necesitamos ayuda para poder sobrevivir y pagar la cuota de autónomos o el alquiler. Estamos en las últimas. Creo que en enero muchos ya no podremos resistir», agregó.

Otra pequeña empresaria, Verónica Peronne, aseguró que espera las ayudas del Ayuntamiento «desde marzo, como habían prometido. Pasan los meses y no llegan. Y parece que tampoco llegarán. Fueron aprobadas en el pleno de octubre, pero el delegado de Comercio ha dicho que no las van a dar. Un día las aprueban y a los dos días, las niegan. Nos tienen a todos un poco locos», agregó.

Uno de los portavoces de la plataforma, Nahuel Klappenbach, que encabezaba la marcha con una furgoneta, aseguró que, para subsistir, los sectores del comercio y la hostelería necesitan recibir ayudas antes de que finalice el año y que el equipo de gobierno contemple en los presupuestos de 2021, que se encuentra elaborando, una partida a la que puedan recurrir las pymes en caso de que la necesitaran. «No tenemos ninguna noticia de las ayudas del 2020, aunque se votaron en pleno. Sólo hay que darse una vuelta por el Casco Antiguo para ver que la mitad de los locales se encuentran vacíos. Las calles están muertas», añadió.

Klappenbach confió en que el equipo de gobierno «recapacite» y anuncie ayudas directas para este año de, al menos, 3.000 euros por establecimiento. «En Mijas y otros municipios se han dado ayudas de entre 3.000 a 6.000 euros en función de criterios como el número de empleados», explicó.

Juan Antonio Lozano, que regenta un restaurante en el Casco Antiguo de Marbella y que acudió al bulevar Pablo Ráez a presenciar la salida de la caravana pero no participó en ella, lamentó que «ni el Ayuntamiento ni la Junta de Andalucía están haciendo nada por nosotros» y calificó de «imbecilidad» que el equipo de gobierno reparta entre los comercios de Marbella 700.000 euros que estaban previstos para contratar la iluminación de Navidad. «¿A cuánto tocamos? ¿A 200 euros cada uno? Sólo restaurantes hay 1.400. Ese dinero habría que dedicarlo a hacer publicidad y bonos para que los ciudadanos puedan comprar o ir a comer, salgan, se muevan y gasten. La gente está desanimada y las calles, vacías, tanto al mediodía como por la noche», apuntó Lozano, que sí se movilizó en la primera protesta de la plataforma.