Coronavirus

El ocio nocturno de Marbella agoniza ante las restricciones horarias

Propietarios de bares y discotecas locales se muestran pesimistas de cara a la temporada estival debido a las medidas y alegan que el virus está presente «a las cinco, a las tres y a las diez»

Zona de ocio en Marbella poco antes de la caída de la noche

Zona de ocio en Marbella poco antes de la caída de la noche / L. O.

Marina Lozano

Más de un año ha pasado desde que el coronavirus es una constante en la vida de todos y en plena quinta ola, el tejido económico ha visto resentido su crecimiento en todo el mundo. Marbella no es una excepción, al igual que tampoco sus negocios, que han visto como las medidas anti Covid-19 han mermado sus ganancias.

Y es que a día de hoy, Marbella es una de las ciudades de la provincia con la tasa más alta. ¿El motivo? Algunos ponen el acento en la irresponsabilidad individual de la población, mientras que otros apuntan al turismo. No obstante, hay una parte de la sociedad que relaciona el incremento de la curva de contagios con un sector en concreto, el de la hostelería, y más concretamente, el ocio nocturno.

Algunas comunidades como Cataluña, Murcia o la Comunidad Valenciana, entre otras, han dado un paso atrás en la desescalada y han tomado medidas como reducir el horario de apertura o cerrar interiores de locales de ocio nocturno.

Una idea con la que no están de acuerdo propietarios de bares, locales de copas o discotecas, que creen injusto el razonamiento. «El virus está igual a las ocho, a las diez o a las tres de la mañana. Si nos dicen que tenemos que cerrar a una hora, la gente va a seguir aglomerada en otros sitios», se cuestiona el propietario del local Badaboom, Alduccio Sebastianelli. «No entiendo por qué estamos tan controlados si tenemos terrazas, sitio al aire libre y medidas que tenemos que cumplir», comenta la socia de Nelly Mc’s, Jade Taylor.

Una etiqueta de verdugo que, según algunos propietarios, nada tiene que ver con ellos. «La gente cuando bebe se relaja con las medidas, lo que pasa que se achaca a la hostelería esa actitud, cuando nosotros hacemos nuestro trabajo. Vendemos alcohol, pero respetamos las medidas de aforo y horario», explica el dueño de Kokoro, Ezequiel Fernández.

Con respecto a las previsiones de cara al verano, cuando se concentra la mayor afluencia de clientela del año, se muestran pesimistas. «Con estas medidas se trabaja solo una hora y media diaria y aún quedan 45 días de verano», se queja Ezequiel Fernández. En la misma línea se posiciona Sebastianelli, que dice que «las previsiones serán peores porque nos están limitando a un perfil de público que no va a poder venir a la hora que tenemos más demanda». Para la socia de Nelly Mc’s, lo ideal sería abrir «en el horario que nos permite la licencia, eso sería lo suyo».

Terrazas vacías durante el día

A las restricciones de horarios nocturnos, se suma el clima propio de la costa, que hace que la población emigre a la playa o piscina por la tarde, dejando las terrazas de los locales vacías. «En Marbella durante la tarde se aprovecha para ir a la playa. Yo no saldría a tomarme la copa, iría por la noche», reflexiona el propietario de Badaboom.

Hasta ahora, las temperaturas estables y los diversos eventos, han marcado el discurrir de los locales, que han visto sus terrazas llenas durante todo el día. «Hemos estado muy bien con la Eurocopa y con el tardeo, que ya ha desaparecido por el calor. Nadie se va a tomar una copa con las altas temperaturas. Yo tampoco lo haría», comenta Ezequiel Fernández. Ahora, solo queda esperar y ver como avanza el verano y la vacunación en el sector de la sociedad más joven.