ELECCIONES

Aumenta la tensión en la Corporación local de Marbella ante la situación política de la alcaldesa

PP y PSOE se acusan de prácticas «rastreras» en las sesiones plenarias y se cruzan peticiones de dimisión de Ángeles Muñoz y José Bernal, mientras que OSP reclama «no desviar la atención de lo que importa, que es que la regidora dé explicaciones»

La Corporación municipal, en el pleno en el que se desataron los ataques entre PP y PSOE.

La Corporación municipal, en el pleno en el que se desataron los ataques entre PP y PSOE. / L.O.

Marcel Vidal

La situación política en la que se encuentra la alcaldesa de Marbella y senadora, Ángeles Muñoz, sumada a la proximidad de la cita electoral del 28 de mayo han elevado la crispación en los últimos días entre las formaciones con representación en la Corporación municipal.

A la tensión generada en el Gobierno local ante las contrataciones entre el Ayuntamiento y empresas investigadas por lavar dinero; las dudas sobre el origen de la fortuna de Muñoz, calculada en unos 15 millones de euros y que investiga el Senado; o el procesamiento de la Audiencia Nacional contra su marido e hijastro por supuestos delitos de blanqueo, narcotráfico y pertenencia a una organización criminal se añadirá en los próximos días una sesión plenaria para abordar de forma monográfica la situación de una alcaldesa que buscará en las urnas revalidar la mayoría absoluta o una victoria que, por mínima que sea, pueda presentar como un espaldarazo a su gestión.

La tensión acumulada por PP, PSOE y OSP tras meses de terremotos políticos y judiciales estalló el miércoles, durante un pleno extraordinario, cuando, en la última intervención, Manuel Cardeña, uno de los concejales más próximos a Muñoz, acusó al edil del PSOE José Bernal de «machacar» al marido de la regidora, el empresario sueco Lars Broberg, aún sabiendo que se encontraba en un delicado estado de salud.

«Sabía que llevaba dos años enfermo y sin capacidad de defenderse. Le sigue insultando. No tiene principios, valores ni corazón», señaló en el pleno un exaltado Cardeña.  

Bernal emitió momentos después un «que bien os ha venido» que el PP atribuye al fallecimiento del empresario sueco, que se produjo a inicios de mes, y que el PSOE asegura que se refería al hecho de que, tras la intervención de Cardeña, se terminaba el pleno.

Aquel enfrentamiento ha desatado un vendaval de críticas cruzadas y peticiones de dimisiones que tiene visos de continuar en los próximos días.

Falta de escrúpulos y bajezas

Un día después del pleno, el portavoz del PP, Enrique Rodríguez, acusó a Bernal de «tener bajeza moral» y le instó a pedir perdón a Muñoz por su «falta de escrúpulos y humanidad» o a dimitir.  

«Es un ejemplo más de que Bernal es una mala persona. Ha hecho un comentario mezquino que no debería permitirse en ninguna situación, menos cuando eres un representante público y estás en un Salón de Plenos. El PSOE ha cruzado líneas rojas en lo político y lo personal», agregó Rodríguez.

El concejal socialista Javier Porcuna ha tachado de «rastrera» la intervención de Cardeña «con todo tipo de barbaridades, insultos y descalificaciones y ante la permisividad de la alcaldesa».

«Cardeña utilizó el nombre de personas fallecidas para atacar al PSOE con mentiras, bajezas marca del PP y manipulando vídeos», agrega el edil.

A juicio de Porcuna, la que debe dimitir es la alcaldesa, «cuyo nombre aparece en el sumario de la Audiencia Nacional por narcotráfico, blanqueo de capitales y organización criminal en el que están procesados miembros de su familia». «Las malas personas son las que venden drogas y se hacen ricas, mientras hay madres que pierden a sus hijos», apunta.

Para el concejal de OSP Manuel Osorio, los acontecimientos de los últimos días muestran el «nerviosismo» en el que, señala, está inmerso el PP ante las polémicas que rodean a Muñoz y su entorno familiar.

En su opinión, el PP trata de «desviar la atención de lo realmente importante y es que Muñoz tiene que dar explicaciones» de los supuestos delitos de blanqueo de capitales, narcotráfico y pertenencia a una red criminal de su familia.