Turismo
La Universidad de Málaga propone limitar las viviendas turísticas y mejorar su inspección
Pide también al Ayuntamiento mecanismos para que los vecinos decidan sobre una «materia sensible» en sus vidas y que mejore la transparencia sobre este tipo de locales con censos y mapas
Una joven pasa por delante del acceso a un inmueble de viviendas turísticas en el casco antiguo de Marbella. | L.O.
La UMA propone al Ayuntamiento de Marbella que, en las diferentes zonas del municipio, limite el porcentaje máximo de viviendas de uso turístico en función del número total de inmuebles y que inspeccione si este tipo de establecimientos cumple las normas municipales para tratar así de poner coto a una oferta que ha alterado de forma sustancial la vida social y económica de los vecinos.
La universidad malagueña recomienda también, en un estudio que le solicitó el Consistorio y presentado ayer, que evite la instalación de viviendas de viajeros en las plantas bajas de los edificios para impedir la destrucción del comercio local; que mejore los procesos participativos informales para que los vecinos decidan sobre una «materia sensible» con gran incidencia en sus vidas; y que refuerce la transparencia sobre este tipo de viviendas con la creación de censos de inmuebles turísticos o mapas interactivos.
Malestar vecinal
El informe recoge también un estudio cualitativo que señala el malestar de los vecinos ante el impacto de este tipo de viviendas, al entender que dificultan la posibilidad de alquilar viviendas para uso residencial o que perjudican su calidad de vida.
Entre empresarios, hay disparidad de posiciones entre los que consideran que las viviendas turísticas dinamizan la oferta del municipio; y los que opinan que este tipo de inmuebles compiten en condiciones asimétricas con otros tipos de alojamientos.
La mayor densidad de viviendas turísticas se encuentra en el casco histórico de Marbella, con 2.086 plazas por kilómetro cuadrado; y la franja litoral y Nueva Andalucía, donde se encuentran Puerto Banús y gran parte de los campos de golf del municipio, con 1.405 plazas por kilómetro cuadrado.
El perfil medio de una vivienda turística en Marbella es un alojamiento completo (frente al compartido) de dos o tres habitaciones y amplias superficies habitables.
El 80 por ciento de los inmuebles turísticos son de titularidad particular; y el resto, corresponde a empresas.
Alta rentabilidad
La rentabilidad por plaza alcanza los 242 euros en temporada alta, según el informe; el presupuesto medio de un inquilino ronda los 1.100 euros y su gasto medio diario, los 173 euros.
El municipio contaba en agosto de 2024 con 13.857 viviendas de uso turístico registrados y cerca de 110.100 plazas, según el recuento de la Junta de Andalucía; y 7.516 inmuebles comercializados y 42.351 plazas, según el INE.
El número de viviendas turísticas registradas en Marbella creció en un 349 por ciento entre 2017 y 2024, señala el informe.
Por su parte, la alcaldesa, Ángeles Muñoz anunció la creación de un registro municipal de viviendas turísticas y una normativa que limitará el cambio de uso para esa actividad de los locales comerciales.
«Analizaremos todos los indicadores para que estos alojamientos supongan siempre un valor añadido para Marbella», señaló.
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