Cultura

La Marbella del pasado desaparece del casco antiguo

El estado de abandono del convento de La Trinidad, del siglo XVI, y el proyecto para habilitar viviendas turísticas en el inmueble en el que pernoctó el rey Felipe IV dejan en una situación crítica el patrimonio del centro histórico del municipio

Una de las fachadas de La Trinidad, apuntalada esta semana para evitar que el convento se viniera abajo

Una de las fachadas de La Trinidad, apuntalada esta semana para evitar que el convento se viniera abajo / l.o.

Marbella

El pasado histórico de Marbella está de retirada en el casco antiguo. El bloqueo de las actuaciones para construir un museo en el interior del convento de La Trinidad, lo que permitiría recuperar un inmueble del siglo XVI que se encuentra en un avanzado estado de deterioro; y el proyecto para transformar en viviendas de uso turístico la Casa del Gobernador, en la que han nacido presidentes del Consejo de Ministros de España y pernoctado Reyes, hacen del centro histórico de Marbella un emplazamiento en el que cada vez sea más difícil reencontrar el pasado del municipio.

Refuerzo de urgencia

Lejos de iniciar las obras para recuperar La Trinidad, postergadas desde hace décadas, el Ayuntamiento ha tenido esta semana que apuntalar y reforzar de urgencia, ante la aparición de diferentes grietas, una de las fachadas del convento, que amenazaba con venirse abajo.

Las fisuras aparecen en un inmueble ubicado en pleno centro del casco antiguo en el que el Ayuntamiento ha propuesto durante los últimos doce años la creación de, al menos, dos tipos de museos, ninguno de los cuales se ha ejecutado.

La alcaldesa de la localidad, Ángeles Muñoz, calificó de prioritaria en 2021 la recuperación de La Trinidad; y en mayo de 2019, anunció un protocolo de colaboración entre el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía para impulsar en el municipio diferentes proyectos culturales, entre los cuales figuraba la construcción del museo de la ciudad en el convento.

En 2013, la regidora presentó un «protocolo de intenciones» para que, en el plazo de tres años, el convento albergara un museo especializado en la arquitectura y el diseño moderno, pionero en la España de aquellos años.

El centro, anunció Muñoz, albergaría planos, fotografías o maquetas de obras emblemáticas del siglo XX y contaría con un espacio específico para la arquitectura marbellí y del resto de la Costa del Sol.

Ninguno de los dos proyectos se han ejecutado y Marbella carece aún de un museo de la ciudad.

Turistas en aposentos reales

El otro proyecto que podría transformar la naturaleza de los inmuebles históricos del casco antiguo busca habilitar once viviendas de uso turístico en la Casa del Gobernador, en la que, en 1624, durmió el rey Felipe IV durante un viaje por el sur de la península Ibérica; y en la que nació José López Domínguez, presidente del Consejo de Ministros desde julio a noviembre de 1906, bajo el reinado de Alfonso XIII.

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ha aceptado a trámite una denuncia en la que una plataforma integrada por asociaciones culturales y empresariales y formaciones políticas denuncia un cambio urbanístico para agilizar el proyecto.

El proyecto, de ejecutarse, supondría privatizar el patio de armas, edificar una planta más o realizar «daños irreparables» en el edificio, asegura el colectivo.

«El entorno de la Casa del Gobernador está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC), lo que impide desarrollos inmobiliarios que desfiguren el patrimonio histórico de Marbella», explica el colectivo.

Según el equipo de Gobierno, el nivel de protección del inmueble, uno de los de mayor valor histórico del casco antiguo, es el mismo que tenía antes del cambio urbanístico.

«Sigue siendo un BIC y depende en última instancia de la Junta», señala.

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