De neumáticos ya se habló en esta sección. Ahora, de nuevo de la mano de Autopremier Costa, concesionario oficial de Opel en Mijas, se va a analizar con lupa los amortiguadores y su importancia a la hora de garantizar la seguridad del vehículo. Los amortiguadores si los tenemos en mal estado van a dificultar la estabilidad y el control, ya que son los encargados de fijar el vehículo al asfalto. Con el tiempo y los kilómetros acumulados, los amortiguadores pierden eficacia y necesitan ser sustituidos. Lo apropiado es revisarlos cada 20.000 km y cambiarlos entre los 65.000 y los 90.000 km. De no cambiarlos pueden llegar a provocar el desgaste de otras piezas del vehículo y, por ende, poner en peligro la seguridad de sus ocupantes. Tener en mal estado los amortiguadores deriva en fuertes vibraciones del chasis y en un mayor desgaste de las llantas.

¿Cuál es el papel de los amortiguadores? Es evitar que las ruedas salten al circular por superficies irregulares, algo que provoca que tanto neumáticos como frenos no puedan cumplir con éxito sus funciones. Los amortiguadores contribuyen en gran medida al confort y la seguridad de la marcha. El mal estado de los amortiguadores, dificultan el control y estabilidad del vehículo aumentando la distancia de frenado y el riesgo de aquaplaning. En concreto, son seis las funciones importantes que cumplen los amortiguadores:

1. Soporte de la carga del vehículo.

2. Absorbe las irregulares del terreno y ofrece confort a sus ocupantes

3. Control de la dirección del vehículo, por ejemplo en curvas.

4. Trabaja en conjunto con los neumáticos para ofrecer una buena adherencia, lo que también influye en la estabilidad y frenada.

5. Mantenimiento de la alineación de la ruedas. Si tu coche gasta de forma anormal un neumático, puede ser causado por el amortiguador.

6. Ofrece la altura óptima del vehículo. Cuando están destrozados, el coche estará más bajo de lo normal.

¿Cómo detectar que es hora de cambiar los amortiguadores? Entre los síntomas de fatiga de los amortiguadores, se detecta que el vehículo experimenta fuertes oscilaciones al superar cualquier tipo de irregularidad o badén de la calzada, la distancia de frenada aumenta de manera alarmante, la tracción del vehículo se muestra intermitente e irregular sin motivo aparente y también se manifiesta un desgaste irregular de los neumáticos.

Tipos de amortiguadores

El tipo de amortiguador más usado en los coches son los amortiguadores hidráulicos telescópicos. Se caracterizan porque ofrecen una fuerza amortiguadora creciente con la velocidad.

Básicamente, los amortiguadores hidráulicos están formados por un cilindro donde hay pistón con aceite. Sobre el pistón hay una serie de válvulas y orificios que permiten el paso del aceite de un lado a otro.

Dentro de la familia de amortiguadores hidráulicos, hay dos clases:

1. Hidráulicos de doble tubo.

Son los más utilizados por los fabricantes de coches, y dentro de este grupo podemos distinguir entre:

- No presurizados: es decir, en su interior solo hay aceite y se pueden formar bolsas de aire en su interior. Además, en climas muy fríos no tienden a trabajar con eficacia.

- Presurizados: tienen aceite más un gas con el que se obtiene mejor rendimiento, estabilidad y confort de marcha.

2. Hidráulicos monotubo

Es el tipo al que suelen recurrir los modelos más deportivos y marcas especializadas. Están formados por dos cámaras principales: una contiene el aceite y la otra el gas (nitrógeno). Estas cámaras están separadas por un pistón que flota entre ellas.

Consejos a tener en cuenta para cambiar los amortiguadores:

1. Comprueba su estado cada 20.000 kilometros

2. Cuando realices la revisión, aprovecha para echarle un vistazo al resto de elementos de la suspensión.

3. Asegúrate que no tengan fugas de aceite. Si es así, deberías sustituirlos o repararlos al instante

4. Si circulas en zonas en la que suelen esparcir mucha sal en la carretera, comprueba que no tengan óxido.

5. Como norma general, cada 5 años o 60.000 kilómetros conviene sustituirlos por unos nuevos.

6. También influye en la vida útil de tus neumáticos la carga que hayan tenido que soportar, si has conducido mucho con remolque, el tipo de conducción y, por supuesto, la clase de carreteras por las que has circulado.

Los amortiguadores son comprobados en las inspecciones obligatorias (ITV) o en algunos casos recordados a los 6 años por los departamentos de post venta de ciertos talleres. Sea como sea, como siempre nuestro consejo, cuando tengas que cambiar los amortiguadores siempre hacerlo en talleres oficiales.