No se habla de otra cosa en Ronda. A última hora del pasado martes, los familiares del brigada Juan Morales ya conocían la trágica noticia, pero fue ayer cuando toda la ciudad se conmocionaba al descubrir que uno de los diecisiete militares fallecidos en Afganistán era natural de Ronda. En todas las conversaciones aparecía este asunto, ya que se trata de una familia muy conocida en el pueblo por su vinculación con el mundo empresarial y son muchas las personas que conocen a alguno de sus integrantes.

Mientras, los familiares del brigada Morales soportan lo mejor posible la llegada de sus restos, aunque son conscientes de que puede ser un proceso que se demore hasta final de la semana.

Uno de sus primos, Miguel Morales, explica que fue su mujer quien se enteró de la noticia mientras comía, justo en el momento en que el ministro de Defensa, José Bono, leía su nombre. "Todos sabíamos que estaba en Afganistán, no había duda", relata emocionado mientras recibe el apoyo de sus compañeros de trabajo, en el restaurante Tragabuches.

De sus palabras, sólo se desprenden elogios para su primo: "Era muy buen chaval, muy familiar. Cuando venía a Ronda nos visitaba a todos los primos y tíos", recuerda Miguel, mientras rememora las vacaciones que han vivido juntos en la localidad rondeña o los felices momentos de su boda, celebrada en Sevilla .

En similares términos se pronuncia otro de sus primos, Rubén Morales, a quien la noticia le sorprendía a la llegada a su trabajo, la emisora municipal de radio. "Cuando empecé a escuchar la lista que ofrecía Bono ya había dicho su nombre", narra.

Al igual que el resto de sus familiares, Ruben resalta la valía humana del fallecido. "Era una buena persona. Me imagino que es lo que siempre se dice, pero esta vez es de verdad", afirmó.

Amante de su profesión. Todos los familiares con los que ha podido contactar La Opinión de Málaga, coinciden en señalar que "era un amante de su profesión", una vocación quizás heredada de su padre, un guardia civil retirado. "Juan siempre quería estar donde se podía ayudar, aunque era consciente del peligro que ello suponía". Tras participar en Bosnia e Irak, el brigada Morales se fue a Afganistán dejando a su mujer, a sus hijas de 7 y 4 años y a sus familiares de Ronda.