Según informó hoy la Dirección General de la Policía, esta operación es una de las más importantes contra el tráfico de heroína en lo que va de año por la cantidad aprehendida, ya que el consumo de esta droga en los últimos años ha disminuido al ser sustituida por otras como la cocaína y el éxtasis.

La droga incautada habría alcanzado en el mercado al por mayor un valor de 621.000 euros y una vez distribuida en dosis el precio hubiera llegado a los 2.850.000 euros, aproximadamente.

La operación, denominada "Hench", fue iniciada hace tres meses por la Brigada Central de Estupefacientes, que centró su investigación en una organización formada por dos grupos, uno de ellos dedicado al tráfico de drogas y otro al blanqueo del dinero obtenido por el primero.

A principios del pasado mes de agosto fueron localizados tres narcotraficantes miembros de la organización en Castellón, donde se habían desplazado para adquirir una importante partida de heroína para distribuirla posteriormente en Madrid y sus alrededores.

Los tres individuos, que fueron detenidos cuando se disponían a entrar en Madrid con la droga, utilizaban dos vehículos para sus desplazamientos como medida de seguridad para evitar los posibles controles de la Policía: uno que viajaba delante como "lanzadera", encargado de avisar de la presencia de posibles controles policiales, y un segundo coche, que viajaba detrás y transportaba la heroína.

A los detenidos, identificados como J.M.J. y A.V.J., con domicilio en Madrid, y J.J.O.P. vecino de Málaga, se les intervinieron 17 kilos de heroína de gran pureza ocultos en uno de los vehículos.

El grupo dedicado al blanqueo de capitales utilizaba un sistema conocido en el mundo árabe como "Hawala", mediante el cual se realizaban importantes transacciones de dinero desde un extremo del mundo a otro, sin que quedara constancia en ningún tipo de documento.

Así, según la Policía, la persona que realizaba la función de banquero de la "Hawala", facilitaba una contraseña (que era la numeración de un billete o un número de teléfono) tanto a la persona que realizaba la función de receptor y custodia del dinero en España como a otras personas que requiriesen los servicios de ésta organización, generalmente relacionadas con todo tipo de actividades ilícitas.

De esta forma, no quedaba rastro de circulación de dinero por los cauces bancarios legales, sino una deuda entre la organización que recogía el dinero y lo hacía llegar al país solicitado por sus "clientes" o las personas que requerían sus servicios, cobrando un porcentaje o de la cantidad a transferir.

Los detenidos por blanqueo de capitales son H.S.A, de nacionalidad pakistaní, y C.D. y L.C.D., ambos británicos y con residencia en Gibraltar.

En el momento del arresto, los residentes en Gibraltar portaban una mochila con 163.00 euros y, además, se les intervino un vehículo de gran cilindrada valorado en más de 120.000 euros.

Tras realizar varios registros en Madrid, en el domicilio de los pakistaníes se encontraron varias máquinas de contar dinero y 310.000 euros.

Todos los detenidos han ingresado en prisión mientras que la investigación continua abierta.