Más de 200 vehículos clásicos de diferentes épocas a lo largo del pasado siglo han sido exhibidos este fin de semana por decenas de coleccionistas que revivieron así la historia del automóvil en Marruecos.

Coleccionistas privados procedentes de diferentes ciudades de Marruecos, así como de otros países como Argelia, Túnez, Libia y Senegal se dieron cita en un concesionario en la localidad de Bouskoura, a unos 100 kilómetros al sur de Rabat, para compartir con el público su pasión por los vehículos de época.

Desde las primeras horas del día, varias personas se acercaron a la feria, unos tratando de sacar "selfies" y otros comentando las cualidades del motor o la carrocería de cada vehículo.

Aparcados en el concesionario hay diferentes modelos que van desde un Citroën B12 de 1926, un Peugeot 201 de los años treinta, un Rolls-Royce, o un Ford Thunderbird de los años cincuenta, hasta los llamados "youngtimer", que representan una categoría más reciente de coches de los años ochenta y noventa como el Golf GTi y Peugeot 205 GTi.

Uno de los vehículos estrella del evento ha sido el "Menara", que fue el primer automóvil construido completamente en Marruecos, pedido expresamente por el difunto rey Hassan II al diseñador italiano Gilbert Guzzo, y que se fabricó como una réplica del Peugeot Bebe de 1913.

Los coleccionistas contaban a los visitantes la historia que encierra cada vehículo y de sus anteriores propietarios: un Citroen DS Pallas que perteneció al mariscal Mohamed Ameziane (llamado en España El Mizzian), un Rolls Royce que usó Barbara Hutton, una millonaria estadounidense y que residió en Tánger (norte de Marruecos) a finales de los años cuarenta; o un clásico Mercedes Benz que fue prestado en el rodaje en Tetuán de la famosa serie "El tiempo entre costuras".

"Estos coches circularon por las antiguas carreteras de Marruecos, forman parte y cuentan la historia del país. Es lo que intentamos poner de relieve en este evento", dijo a Efe Salim Bekkari, un coleccionista de 33 años que cuenta haber sido "contagiado" por su padre por esta pasión.

Bekkari resaltó la importancia de esta feria para promover el ámbito de los coches clásicos y animar a las nuevas generaciones a sumarse a esta pasión.

Tener un coche de época supone dedicar mucho tiempo y esfuerzo desde el momento en el que se encuentra el vehículo, y se buscan las piezas necesarias para restaurarlo, cuidando siempre de mantenerlo en su estado original; un trabajo que según los coleccionistas puede durar varios años.

El vicepresidente de la Unión Marroquí de Automóviles Antiguos (asociación organizadora del evento), Rafik Lahlou, subrayó que esta feria sirve para el intercambio de experiencias entre coleccionistas.

La iniciativa, que va por su segunda edición, incluye en el programa un paseo con todos los coches en las grandes avenidas de Casablanca, una carrera de unos 40 Citroën para celebrar el centenario de esta marca, y un concurso para premiar al coche más antiguo y el más elegante entre otros trofeos.

"Hemos invitado a los coleccionistas a llevar con ellos en el paseo a niños y personas interesadas para inculcar así esa cultura y pasión por el automóvil vintage", señaló Lahlou.

Lahlou sostiene que la cultura automovilística es muy antigua en Marruecos; así, uno de los primeros Mercedes perteneció al sultán Mulay el Hassan en 1895 y los primeros coches empezaron a circular en el país magrebí a principios del siglo veinte.

Y añadió que Marruecos también fue entre los primeros países que organizaban las carreras del Formula 1 en 1958 en Casablanca, que fue ganada entonces por el piloto británico Sterling Crawford Moss.

En cuanto a la idea de que se trata de una afición "elitista", Lahlou defiende que la ilusión por estos coches retro clásicos es compartida por personas de todas las edades y las clases sociales apasionados la historia que está detrás de cada vehículo.

"Lo bueno en los coches de época es que la velocidad se convierte en el último criterio, y lo más importante es el ruido que hace el motor y el olor del cuero del interior del coche", concluyó.