Vigila a tu copiloto: si hace esto mientras conduces, multazo al canto

Muchas personas creen que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado solo te pueden multar si, como conductor, cometes alguna infracción con el coche en marcha. Pero nada más lejos de la realidad: la DGT también prevé sanciones por los comportamientos inadecuados del resto de pasajeros al volante como, por ejemplo, no llevar el cinturón abrochado adecuadamente.

Con su estricta política de normas y sanciones, la DGT persigue unos niveles máximos de seguridad en las carreteras, de los que todavía estamos lejos en España.

Las distracciones al volante, ya sean por causa del conductor (que esté mirando el móvil o haciendo algo que le haga apartar la vista de la carretera) o por culpa del copiloto pueden ser sancionadas según el artículo 18.1 del Reglamento General de Circulación que dice: "El conductor de un vehículo está obligado a mantener la propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente en la conducción; así como cuidar la posición adecuada y que le mantengan el resto de los pasajeros, y la adecuada colocación de los objetos o animales transportados".

Según este precepto, cualquier comportamiento cariñoso como un beso, un abrazo o incluso una discusión podrían provocar una multa en caso de que un agente de tráfico tuviera conocimiento de la situación.