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La Opinión de Málaga
Ver galería >Tras varios días marcados por la lluvia, el sol vuelve a brillar en Málaga este viernes que, aún siendo Viernes de Dolores, sigue siendo un viernes en cuarentena. Pocas o ninguna persona por las siempre concurridas calle Larios, plaza de la Constitución o la renovada Alameda Principal. Tampoco nadie en la plaza de la Marina, cuando son ya prácticamente tres las semanas que llevamos de confinamiento obligatorio tras decretarse el estado de alarma por la pandemia de coronavirus.
Álex Zea
Tras varios días marcados por la lluvia, el sol vuelve a brillar en Málaga este viernes que, aún siendo Viernes de Dolores, sigue siendo un viernes en cuarentena. Pocas o ninguna persona por las siempre concurridas calle Larios, plaza de la Constitución o la renovada Alameda Principal. Tampoco nadie en la plaza de la Marina, cuando son ya prácticamente tres las semanas que llevamos de confinamiento obligatorio tras decretarse el estado de alarma por la pandemia de coronavirus.
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Tras varios días marcados por la lluvia, el sol vuelve a brillar en Málaga este viernes que, aún siendo Viernes de Dolores, sigue siendo un viernes en cuarentena. Pocas o ninguna persona por las siempre concurridas calle Larios, plaza de la Constitución o la renovada Alameda Principal. Tampoco nadie en la plaza de la Marina, cuando son ya prácticamente tres las semanas que llevamos de confinamiento obligatorio tras decretarse el estado de alarma por la pandemia de coronavirus.
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Tras varios días marcados por la lluvia, el sol vuelve a brillar en Málaga este viernes que, aún siendo Viernes de Dolores, sigue siendo un viernes en cuarentena. Pocas o ninguna persona por las siempre concurridas calle Larios, plaza de la Constitución o la renovada Alameda Principal. Tampoco nadie en la plaza de la Marina, cuando son ya prácticamente tres las semanas que llevamos de confinamiento obligatorio tras decretarse el estado de alarma por la pandemia de coronavirus.
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Tras varios días marcados por la lluvia, el sol vuelve a brillar en Málaga este viernes que, aún siendo Viernes de Dolores, sigue siendo un viernes en cuarentena. Pocas o ninguna persona por las siempre concurridas calle Larios, plaza de la Constitución o la renovada Alameda Principal. Tampoco nadie en la plaza de la Marina, cuando son ya prácticamente tres las semanas que llevamos de confinamiento obligatorio tras decretarse el estado de alarma por la pandemia de coronavirus.
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Tras varios días marcados por la lluvia, el sol vuelve a brillar en Málaga este viernes que, aún siendo Viernes de Dolores, sigue siendo un viernes en cuarentena. Pocas o ninguna persona por las siempre concurridas calle Larios, plaza de la Constitución o la renovada Alameda Principal. Tampoco nadie en la plaza de la Marina, cuando son ya prácticamente tres las semanas que llevamos de confinamiento obligatorio tras decretarse el estado de alarma por la pandemia de coronavirus.
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